Uno de los aspectos en los cuales se ha parado más rato Joan Laporta, presidente del Fútbol Club Barcelona, a la hora de analizar la situación actual de la entidad azulgrana ha sido la Espai Barça. La construcción del nuevo Camp Nou ya ha empezado y vivirá su periodo más intenso la próxima temporada, cuando el equipo jugará durante un curso entero al Estadio Olímpico Lluís Companys de Montjuic para poder avanzar en las obras del Espai Barça. Laporta ha querido remarcar la idea que es muy importante que este periodo fuera del Camp Nou sea «tan corto como sea posible», porque supone una «reducción de ingresos» muy relevante. Aun así, el club está trabajando para adecuar la estancia en Montjuic de la mejor manera posible.
Laporta, muy crítico con la gestión del Espai Barça de Rosell y Bartomeu
En este sentido, Laporta ha enviado un dardo envenenado a las juntas directivas que lo han precedido, puesto que considera que se tendrían que haber aprovechado otros momentos para llevar a cabo la construcción del nuevo estadio del Barça y la adecuación de toda la zona que lo rodea. Primero ha criticado la gestión de Sandro Rosell, presidente entre 2010 y 2014, puesto que ha dicho que «las obras del nuevo Camp Nou tendrían que haber empezado hace diez años». Por otro lado, también ha atacado Josep Maria Bartomeu, presidente entre 2014 y 2021, puesto que ha dicho que «se tendría que haber avanzado durante los meses de confinamiento por la pandemia del coronavirus».
En cualquier caso, Laporta se ha mostrado muy satisfecho de la situación actual y ha celebrado que, pronto, «el Barça podrá tener el estadio que merece». De este modo, el presidente azulgrana ha subrayado la importancia de haber concedido las obras a la constructora Limak, la cual, según Laporta, era la que «nos ofrecía las mejores condiciones económicas». Además, esta empresa también garantiza la construcción en el menor tiempo posible, cosa que reduce la etapa del Barça en Montjuic. Finalmente, el presidente del Barça también ha querido subrayar que Limak está llevando a cabo tareas humanitarias para ayudar en las tareas de rescate del terremoto de Turquía y no ha dado credibilidad a las informaciones que hablan de malas praxis de la empresa en la construcción de la aerport de Estambul.
