"La tristeza que transmite el equipo se ha trasladado a la afición, que se debate entre la necesidad de pedir cambios urgentes y la certeza que muchos de ellos son imposibles"
"Madrid ha cogido la máxima de 'todo el mundo es inocente hasta que se demuestre el contrario' y la ha cambiado: el Barça es culpable aunque se demuestre lo contrario"