El Fútbol Club Barcelona ha actuado con contundencia contra el Real Madrid después de que la entidad merengue anunciara que se personará como acusación particular contra el Barça por el caso Negeira. El movimiento que ha hecho la institución azulgrana es simbólico, pero muy potente. El Barça ha decidido anular la tradicional comida de directivas previsto para antes del próximo clásico de Liga, el cual se disputará este domingo 19 de marzo en el Camp Nou, cosa que calienta todavía más este partido. Es el segundo gesto que hace el club culé en relación con este caso, después de que el presidente Joan Laporta dijera recientemente que el Barça «es víctima de una campaña contra su honorabilidad en la que ahora ya están todos», refiriéndose claramente al Real Madrid.
La relación entre el Barça y el Madrid se empieza a romper por el caso Negreira
Desde que Laporta volvió a la presidencia del Barça, las relaciones institucionales entre ambos clubes se habían reforzado de manera ostensible. El presidente azulgrana iba de la mano de Florentino Pérez, su homólogo en el Madrid, a la hora de sacar adelante el proyecto de la Superliga. Esto, además, había generado enemigos comunes entre los dos clubes: la UEFA, la FIFA, LaLiga y sus presidentes, Ceferin, Infantino y Tebas. Cuando estalló el caso Negreira, el Madrid se mantuvo prudente y no dijo nada. La presión de los socios y aficionados del club blanco fue fuerte y, después de la denuncia de la Fiscalía, la directiva merengue se reunió y decidió personarse como acusación particular en el caso. Esto ha hecho que la relación entre las dos entidades se enfríe y se empiece a romper, como se ha visto con este gesto del Barça con la comida de directivas.
