Kylian Mbappé representa el nuevo fútbol. En cuanto al componente deportivo, el delantero del Paris Saint-Germain (PSG) es, probablemente, el mejor jugador del momento. Pero, además, fuera del césped de los campos, genera muchos debates y conflictos. Demuestra que es algo más que un futbolista: es una institución, que está por encima de su actual club. Algo nada habitual en el pasado y en los últimos años, que cada vez se agrava más. Después de que se haya conocido su deseo de marcharse el próximo mercado invernal de fichajes, ahora se han hecho públicas las consecuencias que ha generado esto dentro del conjunto parisino.
El entrenador y el director deportivo del PSG se irían si Mbappé lo hiciera
Tal como ha informado el diario francés Le Parisien, en caso de que Mbappé se marchara del PSG el próximo mes de enero, el director deportivo del club y el entrenador, Luis Campos y Christophe Galtier, también lo abandonarían . Sería un golpe muy fuerte, puesto que se daría a media temporada, con muchas cosas en juego. Además, demostraría la división que existe en el club. Estas salidas evidenciarían que dos figuras tan primordiales están a un lado de un futbolista y no del presidente, cosa nada habitual. ¿Y por qué querrían marcharse? Según las mismas informaciones, por su buena relación con el propio Mbappé.
La fuerte exigencia de Mbappé a los dirigentes del PSG
Por otra parte, todavía en clave Mbappé, según varios medios franceses, el jugador ha exigido al club que cara al mercado de fichajes invernal próximo fichen a un delantero centro. Como ha dejado claro recientemente, con declaraciones o incluso publicaciones en sus redes sociales, no está cómodo con su posición en el conjunto de Galtier.
Si bien su demarcación favorita es la del extremo izquierdo y es donde más ha brillado hasta ahora, la presencia de Neymar Jr y Leo Messi ha hecho que en muchas ocasiones tenga que ejercer como hombre referencia . Después de que durante el verano el PSG no haya conseguido incorporar a Marcus Rashford, delantero del Manchester United, ni a Robert Lewandowski, que cambió el Bayern de Múnich por el Fútbol Club Barcelona, ahora el presidente, Nasser Al-Khelaïfi, y los dirigentes del club tienen deberes inminentes para contentar a su hombre insignia.
El presidente del PSG quería otro entrenador
Finalmente, tal y como ha destapado L’Équipe, no como noticia pero sí como dato interesante, después de decidir la despedida del técnico Mauricio Pochettino, Al-Khelaïfi pretendía incorporar Thiago Motta como sustituto, ex jugador del Barça y con una trayectoria importante en el conjunto francés la década pasada, pero finalmente se priorizó el deseo de Campos, que priorizaba a Galtier.
