El mercado de verano fue muy prolífico para el Barça. Robert Lewandowski, Jules Koundé, Marcos Alonso, Héctor Bellerín, Andreas Christensen, Franck Kessié y Raphinha llegaron a Barcelona. Siete fichajes -más Pablo Torre– para volver a construir un equipo competitivo que pudiera ganar títulos otra vez. La ilusión era máxima, pero un nuevo revés europeo ha complicado las cosas. La economía azulgrana continúa siendo muy delicada y la eliminación de la UEFA Champions League ha supuesto un descalabro importante para la entidad culé. Las malas actuaciones en Europa han hecho reflexionar al staff técnico y a la directiva, llegando a la conclusión que todavía faltan retoques en el equipo para ser más competitivos. Las restricciones para fichar serán elevadas, pero el Barça intentará incorporar algún futbolista durante el próximo mercado de invierno. Ilkay Gündogan es uno de los nombres que gustan, y mucho.
Relevante para Pep, pero puede cambiar de aires
Ilkay Gündogan ya no es titular indiscutible en el Manchester City de Pep Guardiola, pero continúa siendo importando para el técnico de Santpedor. El centrocampista alemán ha disputado veinte partidos esta temporada entre Premier League, Champions League, Carabao Cup y Community Shield. De esos veinte, dieciséis los ha empezado como titular. Es uno de los futbolistas que más equilibrio da a los esquemas de Guardiola. Sin embargo, Gündogan ya tiene 32 años y, después de casi siete temporadas en el Etihad Stadium, no vería con malos ojos una salida para finalizar su carrera futbolística. Su contrato con los citizens acaba en junio del año próximo y el Barça está atento a la situación.
Alternativa a Bernardo Silva
A nadie se le escapa que el gran deseo del Barça es fichar a Bernardo Silva. Los azulgranas lo intentaron hasta el último momento durante el pasado mercado de verano, pero fue imposible. Con la incorporación del portugués prácticamente descartada en invierno, la opción de Gündogan es más factible. Además, cumple los requisitos que pide Xavi a la hora de fichar a un centrocampista: buen toque de balón, visión de juego y, a pesar de que es interior, puede adaptarse con facilidad a la posición de pivote. Y es que el ex del Borussia Dortmund ya gustaba a la secretaría técnica culé cuando jugaba en Alemania, pero el Manchester City se avanzó. Habrá que ver si se inician contactos o si el Barça prefiere esperar y firmarlo libre a final de temporada.