Finalmente, el Fútbol Club Barcelona no presentará ninguna queja formal a la UEFA. Según Mundo Deportivo, después de que la entidad catalana se planteara llevar a cabo esta opción, ha terminado desistiendo a consecuencia de las pocas posibilidades que tenía el recurso de prosperar. De esta forma, todas las quejas surgidas por los errores arbitrales vividos en Milán, en la derrota por 1-0 ante el Inter que complica el futuro culé en la Champions, se resumirán en las declaraciones pospartido de varios jugadores y del técnico del primer equipo, Xavi Hernández.
Según explica el medio, la intención era enviar al organismo dirigente del fútbol europeo las imágenes de la jugada del penalti no pitado por unas manos del defensa del Inter Denzel Dumfries, del gol posiblemente mal anulado a Pedri González y de una dura entrada de Hakan Calhanoglu, autor del único gol, sobre Sergio Busquets, que podría haber supuesto una tarjeta roja.
Las manos clarísimas de Dumfries
La primera acción es la que más indignación ha generado, teniendo en cuenta que es la más clara y que sucedió a finales del encuentro. Corría el minuto 90 en el marcador cuando, justo antes de los ocho de añadido y con un 1-0 en el marcador, se dio la jugada en cuestión. Tras un buen balón hacia Sergi Roberto, el reusense sirvió el balón en el área. Le esperaba Ansu Fati, pero quien tocó la pelota fue un rival. Dumfries la rechazó y, como se aprecia en la repetición, lo hizo con la mano.
Un penalti como una casa, que debería pitarlo cualquier árbitro. Una vez la pelota salió y por tanto el juego se interrumpió, los árbitros del VAR han acabado de repasar la jugada. La conclusión fue que han comunicado al colegiado principal que no había nada (o, en todo caso, que la mano era involuntaria), y éste hizo que el partido siguiera jugandose.
El gol anulado a Pedri por unas manos de Ansu Fati
La siguiente acción polémica es la del gol anulado. Como ha explicado, entre otros, el exsegundo entrenador culé Eder Sarabia en Twitter, puede ser otro error. Durante la segunda mitad, el Barça ha empatado a uno mediante Pedri pero, sin embargo, el árbitro impugnó el gol porque Ansu Fati tocó la pelota con la mano durante la jugada…
… Pero como bien indica Sarabia, según el reglamento, no debería haber sido anulado, ya que el hispano-guineano no fue el autor de la diana, sino que simplemente participó (siempre y cuando se entienda que la mano es involuntaria, que, según la repetición, parece que así es y que no se puede interpretar de otra forma).
La fea entrada de Calhanoglu que se solucionó con una amarilla
Finalmente, el Barça pretendía también protestar por la jugada de Calhanoglu con Busquets. El centrocampista turco entró sobre el catalán a destiempo, con una entrada muy fea que podría haber sido castigada con una expulsión. De hecho, según el mítico exárbitro español Iturralde González, ahora tertuliano en la Cadena SER, iba a ser tarjeta roja, porque «es juego brusco grave de manual». Sin embargo, el árbitro de la contienda lo solucionó con una tarjeta amarilla.
