El caso del Fútbol Club Barcelona y el arbitraje, vinculado con el pago de varias facturas a la empresa DASNIL 95, propiedad del exárbitro y exvicepresidente del Comité Técnico Arbitral (CTA) José María Enríquez Negreira, estalló hace un par de días como una bomba y generó mucha confusión, pero poco a poco se va esclareciendo qué es lo que ha pasado durante todos estos años entre el Barça y este personaje. Por lo que ha transcendido, el club azulgrana no pagó estas facturas para comprar partidos o árbitros, pero sí que pretendía, presuntamente, aprovecharse de las informaciones que poseía Enríquez Negreira por su profesión para conocer mejor a los colegiados de la Primera División.
Los excompañeros de profesión de Enríquez Negreira revelan su papel en el CTA
Sin embargo, esta jugada le salió muy mal a la entidad culé, porque, por lo que se ha ido conociendo, poco o nada pudo aportar Enríquez Negreira al Barça. Según han revelado varios exárbitros y exmiembros del CTA al diario El País, este personaje no tenía ningún tipo de influencia dentro de este organismo y las informaciones que podía trasladar a la institución azulgrana no pudieron hacerle mucho servicio. No es solo que no designara árbitros, cosa que ya ha quedado más que probada y explicada y descarta, por lo tanto, que el Barça pudiera haber utilizado Enríquez Negreira para manipular la competición, sino que muchos de sus excompañeros de profesión le consideran una persona que, directamente «no pintaba nada».
Algunas otras frases que han transcendido y son relevantes son las siguientes: «Era cómo el
