Vicente Moreno se ha despedido del Real Club Deportiu Espanyol después de que haya sido destituido por el presidente Chen Yansheng a causa de la imagen del equipo de las últimas jornadas. Su cese ha sido abrupto y sorprendente, puesto que solo quedan dos jornadas para el final de temporada y se esperaba que una decisión como esta se tomara tranquilamente en verano. Aun así, Chen ha aprovechado la certificación de la permanencia matemática del conjunto blanquiazul en la Primera División para ejecutar su sentencia. Vicente Moreno ha aceptado esta decisión con muchísima calma y elegancia y con una frase que demuestra que ha entendido perfectamente la situación: «Todo tiene un inicio y todo tiene un final y se tiene que aceptar».
Vicente Moreno, una despedida elegantísima
No ha habido ningún reproche del entrenador valenciano a nadie del club, todo al contrario. Incluso ha agradecido a Chen Yansheng la oportunidad de haber podido dirigir el Espanyol, que ha considerado que es un equipo «con una capacidad de crecimiento brutal». También ha dado las gracias a todas aquellas personas que ha podido, desde los jugadores de la plantilla, hasta los encargados de mantenimiento o de la limpieza de Cornellà-El Prat y la Ciudad Deportiva Dani Jarque. De hecho, lo único que le ha faltado ha sido nombrar uno a uno todos los nombres de las personas con quienes ha trabajado durante estos dos años.
El entrenador reivindica que ha cumplido con todos los objetivos que le ha puesto el Espanyol
Ahora bien, Vicente Moreno también ha aprovechado la ocasión para sacar pecho y reivindicar que, si bien es cierto que entiende la destitución, él también ha cumplido con todos los objetivos que el club le ha ido poniendo, primero el ascenso y después la permanencia, y ha defendido que él se veía capacitado para volverlo a hacer la próxima temporada: «El equipo venía de una situación dramática con el descenso y nos encontramos con un escenario complicado, pero nosotros hemos ido cumpliendo con todos los objetivos que se nos han marcado: el ascenso de categoría el primer año y la permanencia el segundo. Teníamos mucha ilusión en esta tercera temporada, porque creíamos que podíamos hacer el salto de calidad».
Un mensaje misterioso
El único mensaje misterioso o críptico que ha dejado Vicente Moreno ha sido el siguiente: «Los últimos días el ambiente ha estado enrarecido, así que probablemente esta es la mejor decisión». No ha quedado del todo claro si el técnico valenciano hacía referencia al vestuario, con su famosa enganchada con Raúl de Tomás, a los silbidos y chillidos de Cornellà-El Prat o a su relación con los directivos del club. Así pues, ha resultado extraño que por un lado haya reivindicado su ilusión de continuar en el equipo la próxima temporada, pero que por otro lado haya reconocido que la situación era insostenible.