A pesar de que el Real Club Deportiu Espanyol consiguió un empate histórico en Cornellà-El Prat después de remontar los tres goles iniciales del Atlético de Madrid, los pericos se quedaron a un tanto de una victoria que les habría dado tres puntos vitales para poder lograr la permanencia. La diferencia de goles podría haber sido favorable al Espanyol si el VAR no hubiera validado el segundo del Atlético, una diana de Antoine Griezmann que en un primer momento el árbitro no vio, pero el sistema de videoarbitraje revisó y consideró que la pelota había atravesado la línea.
Luis García pide imágenes que demuestren que la pelota entró del todo
La indignación en el Espanyol es mayúscula, puesto que, como mínimo por televisión, no se pudo ver ninguna imagen donde manifiestamente hubiera evidencia de que la pelota había cruzado del todo la línea de gol. En este sentido, el entrenador perico, Luis García, explicó en rueda de prensa que el club ha pedido imágenes a LaLiga que demuestren que el VAR pudo ver claramente que era gol y que no había ninguna duda. La normativa dice que el sistema de videoarbitraje solo puede actuar si la acción es manifiesta y, como mínimo por lo que se vio en televisión, no había evidencias claras del gol y, por lo tanto, la jugada no se habría tenido que revisar.

LaLiga no tiene tecnología de gol y el Espanyol podría ser un gran perjudicado
Ahora bien, todo esto se podría haber solucionado de una manera muy sencilla: con la tecnología de gol. Esta consiste en un sistema que detecta automáticamente si una pelota ha atravesado la línea del todo y, en caso de hacerlo, avisa al árbitro a través de un reloj. Es un método que puede resultar familiar a mucha gente, puesto que se utiliza en competiciones como la Champions League o la Premier League, pero en LaLiga no está. Esto se debe al hecho de que supondría un sobrecoste de dos millones de euros por temporada, cosa que, teniendo en cuenta las fortunas que mueve esta competición, tampoco es ninguna barbaridad. Javier Tebas, presidente de LaLiga, considera, sin embargo, que por las pocas veces que se tendría que usar, no merece la pena. Esta vez, por eso, ha quedado demostrado que la tecnología de gol podría ser la diferencia entre una permanencia y un descenso.