El Espanyol se enfrentaba hoy a un equipo que juega en una liga regional de Andalucía. La diferencia de categoría es abismal. Para ponerlo en contexto, el Rincón juega dos categorías por debajo del Espanyol B, lo que sería sexta división. Los malagueños no son jugadores profesionales de fútbol: en la plantilla hay bomberos, policías, profesores, opositores… Además, no han podido jugar en su estadio, porque no está en suficiente buen estado. Pues ni contra un equipo así el Espanyol ha podido ganar con solvencia hoy en La Rosaleda de Málaga. Practicando un juego muy pobre, los blanquiazules han tenido bastante con tres goles en la segunda parte para pasar a la siguiente ronda de la Copa del Rey.
Primera parte insípida con show final
Aunque parezca difícil de creer, en la primera mitad el Espanyol no ha disfrutado de ninguna oportunidad clara de gol. Los blanquiazules han dominado la posesión con total claridad, pero no han sido precisos en los metros finales. Diego Martínez ha querido dar la titularidad a jugadores menos habituales, como Villahermosa, Dani Gómez o Simo, pero también ha compensado el equipo con habituales en el once como Leandro Cabrera o Edu Expósito. Sea como fuere, ni unos ni otros han conseguido inquietar la portería de un equipo de sexta división durante los primeros 45 minutos. Por si no fuera suficiente, en el minuto 43, Dani Gómez ha sido expulsado por empujar al árbitro mientras se quejaba de una acción. Los malagueños se han limitado a defenderse con orden y a dejar pocos espacios a los visitantes y con esto han tenido bastante para obtener un empate al descanso.
Los titulares lo salvan en la segunda parte
Si la primera parte ha acabado con jaleo, la segunda ha empezado igual, con una expulsión. En el minuto 49, el local Toni Conejo ha hecho una dura entrada por detrás a Edu Expósito y le ha costado la tarjeta roja directa. Esta acción ha facilitado las cosas para el Espanyol y, diez minutos después, Javi Puado -quién había entrado al descanso- ha avanzado a los blanquiazules. Los malagueños no han encajado bien el golpe del primer gol y el físico les ha empezado a jugar malas pasadas. En el minuto 70, Edu Expósito ha marcado el segundo gol del partido con un disparo desde la frontal. A poco más de cinco minutos para el final, Joselu -quien acababa de entrar- ha hecho el tercero y definitivo gol. El encuentro ya no ha tenido más ocasiones de peligro, más allá de un palo del mismo Joselu: el Espanyol se ha conformado y el Rincón estaba totalmente agotado físicamente.
