El fichaje de Pierre-Emerick Aubameyang en el pasado mercado invernal de fichajes fue clave. Por muchos motivos. Para empezar, por contratar a un jugador que está solucionando la sequía goleadora que tenía el equipo hasta entonces. Con Memphis Depay y Ansu Fati lesionados, costaba materializar el buen juego que ya tenía el Barça de Xavi en muchos partidos, y a menudo esto condenaba al equipo. Afortunadamente para los intereses del técnico egarense, el gabonés se ha adaptado muy rápidamente.
Su incorporación también ha sido muy inteligente en materia de la continuidad de Ousmane Dembélé en el Barça. Cabe recordar que antes de compartir vestuario en el Barça, ambos lo hicieron en el Borussia Dortmund. Y allí, después de un año, se hicieron amigos. No sería para menos, teniendo en cuenta la alegría de Aubameyang y que ambos hablan francés. Ahora, Aubameyang es consciente de la situación contractual del campeón del mundo y de su negativa a renovar, pero no pierde su esperanza.
En la rueda de prensa previa al trascendental partido de vuelta de octavos de final de la UEFA Europa League ante el Galatasaray, en el campo de los turcos, Aubameyang se ha pronunciado. «Ya hemos hablado un poquito [sobre la renovación], y al final será su decisión. Claro que me gustaría que se quedara un año más o dos o los que sea… pero estoy muy contento de jugar ahora con él, y veremos lo que pasa».
El gabonés ve al francés «muy bien. Desde que llegué lo he visto entrenar muy bien, con muchas ganas y lo está haciendo muy bien. No tenía dudas porque lo conozco. Yo le doy sonrisas. Lo importante es que es feliz y trabaja».
El resurgimiento de Dembélé ha coincidido con la llegada de Aubemeyang
Hay que recordar que tanto por la circunstancia de reencontrarse con uno de sus grandes amigos en el fútbol como por la de sentirse querido por un entrenador azulgrana por primera vez, Dembélé está ofreciendo su mejor versión desde que aterrizó en Can Barça. Tiene continuidad, no se lesiona y convierte los silbidos de la afición en aplausos.
El mosquito fue clave para revolucionar el partido de ida contra el Nápoles, de dieciseisavos de final, que acabó en empate a uno. Y, desde entonces, ha acumulado seis asistencias y un gol… ¡en sólo seis partidos! Con todavía muchos partidos en el horizonte (al menos doce), Dembélé está a sólo dos asistencias de igualar su mejor registro en una temporada con el Barça (la temporada 2018/2019 hizo 9, y ahora lleva 7).
Es tercero en el ranking de máximos asistentes a la Liga, con las siete citadas, y en un cuádruple empate con Jordi Alba; Jorge de Frutos, del Levante; e Iker Muniain, del Athletic Club. El próximo fin de semana, en el clásico, buscará ampliar la estadística y escalar posiciones para recortar a Karim Benzema, líder con once, y Óscar Trejo, del Rayo Vallecano, con nueve. Antes, buscará volver a ser clave en un partido de Europa League.
