Xavi Hernández no hace más que recibir buenas noticias. Más allá del serial Dembélé. El técnico del Fútbol Club Barcelona ha ido encontrando o recibiendo soluciones paulatinamente a muchos de los problemas que encontró a su llegada hace dos meses y medio, y ve cómo el barco azulgrana comienza a estabilizarse. Soluciones en forma de recuperaciones de futbolistas importantes como Pedri o Ansu Fati, y de fichajes. Y es que la directiva, que ya firmó el extremo derecho Ferran Torres, ha premiado ahora al terrassense con la inscripción al primer equipo del joven centrocampista hasta ahora del filial pero ya asentado con los mayores Nico González.
Esto es ibuprofeno para un Xavi que semanalmente afronta el dolor de cabeza de la norma de los siete jugadores del primer equipo. Y es un gran paso para la carrera de un Nico que ya ha heredado el dorsal de los escogidos. Y es que el de La Coruña lucirá a partir de ahora un 14 dorado en la historia culé. Es el dorsal que utilizaron leyendas de la historia azulgrana como Johan Cruyff, Thierry Henry o Javier Mascherano. Pero también lo han hecho villanos como Amunike, Santi Ezquerro o Philippe Coutinho. El brasileño, de hecho, es quien le ha dejado libre, al haberse marchado cedido al Aston Villa. Nico, por tanto, deja vacante un 28 reservado para futbolistas del filial.
Ésta es una gran noticia para el futbolista, que además pasará a percibir un salario de jugador del primer equipo. Y también para su entrenador. Y es que Xavi Hernández fue víctima de la norma que establece la Federación Española de Fútbol de los siete jugadores del primer equipo. Concretamente, ésta dicta que, durante los partidos, en todo momento los equipos deben tener en el césped al menos a siete jugadores del primer equipo. Por tanto, como máximo cuatro del filial.
¿Qué ha implicado esto hasta ahora? Que Xavi tuviera que prescindir de futbolistas concretos del filial que muy probablemente sí hubiera alineado de no existir la norma. ¿Y por qué la inscripción de Nico en el primer equipo es una buena noticia en este contexto? Porque ahora el gallego podrá jugar siempre, sin depender de ninguna norma.
De hecho, él fue una de las víctimas de la norma. Por ejemplo, en el empate ante el Sevilla en el Ramón Sánchez Pizjuán, Xavi puso a los futbolistas con ficha del filial Abde, Gavi y Ferran Jutglà como titulares. Claro, también podía haber alineado un cuarto, y por tanto Nico. De hecho, el gallego venía de cuajar muy buenas actuaciones y probablemente habría jugado en el sitio de Frenkie de Jong. Pero esto habría significado jugar con fuego, ya que una expulsión del holandés o de los otros seis futbolistas con ficha del primer equipo automáticamente hubiera hecho perder el partido en el Barça.
De hecho, tras el partido en cuestión, Xavi aseguró que ésta se trata de «una norma bastante estúpida». Y ya avanzó que buscarían la fórmula de hacer fichas del primer equipo como la flamante de Nico. Ha costado, dadas las circunstancias del fair play financiero, pero ya está hecho. Y, de hecho, Gavi podría ser el siguiente. Por tanto, un centrocampo copado por Nico, Gavi y Pedri dejará de ser un sueño tarde o temprano para convertirse en una realidad. El gallego, el andaluz y el canario están cada vez más cerca de canalizar el juego del Barça del futuro más reciente. ¡Ya están aquí!
