El Camp Nou ha vivido la noche que hacía años que quería volver a vivir. Las últimas temporadas no han sido nada fáciles. Solo una Copa en los últimos tres años, el Barçagate, la marcha del mejor jugador de la historia, Leo Messi, los tiempos oscuros de Ronald Koeman en el banquillo y ahora, últimamente, el caso Negreira. Es por eso que el barcelonismo necesitaba con urgencia una gran alegría, una noche de euforia, y esta ha llegado en el Camp Nou. El Barça de Xavi Hernández ha hecho una de las cosas más bonitas que se pueden hacer en este deporte: remontar un partido contra el eterno rival, ganarlo en el último minuto y, a la vez, sentenciar la Liga. El Fútbol Club Barcelona, gracias a los goles de Sergi Roberto y Franck Kessie, ha ganado el clásico contra el Real Madrid (2-1) y se escapa a doce puntos al frente de la clasificación.
La crónica del Barça-Madrid (2-1)
La puesta en escena de los azulgranas ha sido espectacular. En los diez primeros minutos, los culés han tenido hasta tres ocasiones claras de gol. La primera ha sido de Robert Lewandowski, que ha demostrado que tenía ganas de jugar este partido y ha sido mucho más fin que en las últimas jornadas. El polaco ha probado un chut lejano que ha parado Thibaut Courtois con una buena parada. Después, Raphinha ha tenido una que era todavía más buena y que ha hecho que el portero belga del Madrid se luciera todavía más. En el rebote, Sergi Roberto ha estado a punto de marcar, pero su remate se ha marchado desviado.
Cuando todo parecía encaminado a una noche plácida y bonita en el Camp Nou, todo ha cambiado de repente de la manera más inesperada. En una acción de ataque del Madrid que no era nada peligrosa, Vinicius Júnior ha centrado una pelota, ha rebotado en el cuerpo de Ronald Araujo y con el rebote se ha envenenado y ha acabado entrando al fondo de la portería. De este modo, la bestia negra del brasileño, con mala suerte y de manera absurda, ha convertido un pase inofensivo en un gol en contra.
A pesar de que el Barça estaba dominando el primer tramo de duelo con claridad y solo tenía que continuar haciendo el mismo, los azulgranas han quedado muy tocados después de un gol que llegaba de una manera tan injusta. Durante un buen rato, se ha jugado el partido que quería el Madrid: sin control azulgrana y sin ocasiones. Hasta la recta final del primer tiempo, el Barça solo ha tenido dos buenas ocasiones de Andreas Christensen en la salida de córners.
Sin embargo, en los últimos diez minutos antes del descanso el Barça ha puesto una marcha más y ha vuelto a ser un equipo similar al del principio del partido. Courtois ha vuelto a brillar para rechazar a córner un chut potentísimo de Raphinha y un remate de Lewandowski se ha marchado desviado. Justo antes de la media parte, sin embargo, una jugada muy larga del Barça con varios centros al área ha acabado con una pelota muerta que Sergi Roberto ha cazado y ha enviado al fondo de la portería. Buen gol del de Reus para empatar el duelo en uno de los momentos que hacen más daño. La sensación es que se ha hecho justicia.
Segunda parte vibrante en el Camp Nou
El empate le ha dado mucha tranquilidad al Barça, que ha podido salir a la segunda parte sin urgencias y pudiendo hacer el juego que más le gusta. En los primeros minutos de la segunda parte, los azulgranas han llegado con peligro a la portería de Courtois, si bien no ha habido ninguna ocasión clara. Cuándo han pasado quince minutos desde la reanudación, Lewandowski sí que ha estado a punto de marcar, con un chut lejano a la media vuelta, que le ha salido con mucha potencia y no ha entrado de milagro.
Ha llegado el minuto sesenta y el empate continuaba en el marcador. Parece que ha sido a partir de entonces que el Madrid se ha dado cuenta de que si no ganaba el duelo, casi podía decirle adiós a la Liga. Ha dado un paso al frente y esto ha forzado que se rompiera el partido, por lo tanto, ocasiones a ambos lados. Teniendo en cuenta la situación, el Barça ha sido muy valiente, muy fiel al estilo y ha regalado un gran espectáculo futbolístico. Ahora bien, el hecho de continuar presionando, buscando la victoria y no encerrarse en defensa ha estado a punto de provocar algún ataque de corazón en el Camp Nou. De hecho, el Madrid ha celebrado un gol en el minuto ochenta, pero el VAR, después de revisarlo durante un buen rato, lo ha anulado por fuera de juego.
El Barça se ha salvado por los pelos y esto ha dado oxígeno al equipo. En el minuto noventa ha sido cuando ha caído el Camp Nou. Jugada espectacular de Lewandowski, pase para Alejandro Balde, centro para Franck Kessie y gol del marfileño. Los aficionados azulgranas han celebrado este gol con un grito que llevaban guardado en la garganta desde hacía tiempo. Después de tres temporadas durísimas en cuanto a resultados, después de la marcha de Messi y después del estallido del caso Negreira, el gol de Kessie ha supuesto sentenciar una Liga en el Camp Nou ante el eterno rival. Al poco de la diana, final, tres puntos para el Barça y a doce del Madrid.
