El Fútbol Club Barcelona vuelve a la competición después de su despedida de las competiciones europeas. Esta semana, ha caído derrotado y eliminado de la UEFA Europa League, en manos del Manchester United y en Old Trafford. Ya se sabe que para pasar página de un dolor, lo mejor es tener una redención rápidamente. Si una derrota antes de un parón de selecciones puede hacer daño, una derrota como la que se dio en tierras británicas se puede curar en la visita azulgrana al estadio del Almería, tan solo tres días más tarde.
A pesar de la excelente trayectoria del equipo en el presente campeonato de LaLiga, es sabido por todo el mundo que durante los últimos años se han dado muchas decepciones continentales. Esto significa que el Barça ha tenido muchos partidos para resarcirse. Muchos días para hacer dar un golpe encima de la mesa o, para simplemente, pasar el mal trago. En las últimas cuatro ocasiones, el club azulgrana ha vuelto a pinchar. ¿Cómo han sido? Món Esport los repasa.

Después de París, en 2017, victoria in extremis contra el Leganés, a casa
La primera gran derrota europea en la etapa contemporánea del club se produjo la noche de San Valentín del año 2017. Corría la temporada 2016/2017, la última de Luis Enrique, cuando los Leo Messi, Neymar Jr, Luis Suárez y compañía cayeron por 4-0 en el Parque de los Príncipes. Una durísima derrota por el
El Barça tenía contra el Leganés, a casa, una buena opción de, como mínimo, lamerse las heridas y sumar tres puntos importantes en la carrera por la Liga con el Real Madrid. Los azulgranas ganaron el match, pero lo hicieron
Victòria por la mínima después de un doble golpe: derrotas casi decisivas contra el Málaga y la Juventus
Aquella misma temporada se dieron dos otros golpes también dolorosos. El primero en cuestión no fue europeo. Fue una derrota en el campo del Málaga, que complicó LaLiga a los culés. Si bien lo ganaron todo a partir de allá, el Madrid no aflojó. Quien tampoco aflojó fue la Juventus. Después de la histórica remontada por 6-1 al PSG, el Barça quedó emparejado en el sorteo de los cuartos de final de la Champions con una poderosa Juventus. Y los italianos ganaron la ida con un doblete de Paulo Dybala y una exhibición de fútbol. Esta derrota europea parecía definitiva. Y así lo acabó siendo. Los italianos tenían mucho más oficio que los franceses.
¿Cómo reaccionó el Barça, pues, a la derrota contra la Juventus por 3-0? Con una victoria de prestigio, pero sufrida, contra la Real Sociedad, en el Camp Nou. Los de Luis Enrique se avanzaron al marcador con un doblete del de siempre: Messi. Los
Después de Roma, en 2018, victoria en el Camp Nou contra el Valencia para curar las heridas y encarrilar la Liga
La primera derrota europea mayúscula es la de la temporada 2017/2018. Hay que tener en cuenta que las mencionadas hasta ahora podían entrar en los planes. Además, pertenecen a un ciclo muy ganador: Luis Enrique ganó el triplete en 2015. El curso 2017/2018, sin embargo, se abrió uno nuevo, con Ernesto Valverde en el banquillo. Después de perder la Supercopa del verano del 2017, el Barça tomó un ritmo de crucero. Hizo una primera mitad de la temporada estratosférica en términos de resultados, con un claro liderazgo enla Liga (habiendo ganado en el Santiago Bernabéu por 0-3) y una fase de grupos en la Champions inmaculada.
Aun así, llegaron curvas, muy pronunciadas, después de recibir en el sorteo de los cuartos de final el rival teóricamente más asequible y de vencerlo por 4-1 en la ida a casa. En la vuelta de aquella eliminatoria, la Roma de Daniele de Rossi, Kostas Manolas y compañía hundió por primera vez el Barça de Josep Maria Bartomeu. Los italianos hicieron una remontada histórica, con un 3-0 al marcador. ¿Y como reaccionó el equipo azulgrana?
El equipo azulgrana se impuso en la visita del Valencia con una buena victoria, protagonizada por Philippe Coutinho. El brasileño sirvió dos asistencias, a Luis Suárez y a Samuel Umtiti, antes de que Dani Parejo acortara distancias. Un 2-1 importante para mantener las distancias al frente de la clasificación de la Liga. Eso sí, ayudó mucho la carencia de puntería del delantero valencianista Rodrigo Moreno. Los azulgranas tuvieron dificultades para entrar al partido, a pesar de que lo acabaron haciendo.
Después de Liverpool, en 2019, una victoria ya intrascendente en la Liga contra el Getafe, y con un ambiente extraño en el Camp Nou
El Barça sufrió nuevamente una remontada adversa la temporada siguiente. El segundo Barça de Ernesto Valverde, menos sólido y más dependiente de Messi, venía haciendo un buen curso. En las semifinales de la Champions tocaba el poderoso Liverpool. En la ida, a pesar del dominio inglés, el Barça ganó por 3-0. Pero en la vuelta volvió a suceder un desastre: remontada por 4-0 y adiós a la Champions.
El siguiente partido era uno intrascendente. El Barça ya había ganado la Liga, con mucha solvencia. Era la penúltima jornada del campeonato, en el Camp Nou y contra un muy buen Getafe, que agotaba sus opciones de clasificarse a la Champions del curso siguiente. Aun así, los culés se impusieron, con un gol de Arturo Vidal y uno en propia portería, de Mauro Arambarri.
Pero lo más importante pasó en las gradas. Para empezar, a pesar de disputarse en una tarde primaveral en un fin de semana, el estadio tuvo solo media entrada. Y dentro de esta media entrada, la afición silbó al equipo en muchas ocasiones. Especialmente a Coutinho. A pesar de la victoria, ni él ni sus compañeros estuvieron lúcidos.
Después del desastre a Lisboa, con el 2-8, el Barça de Koeman abrió un nuevo curso con mucha ilusión
El Barça cerró la temporada 2019/2020 con la peor derrota contemporánea: un 2-8, a manos del Bayern, en los cuartos de final de la Champions. Como esta, por cuestiones de la Covid-19, se disputó durante agosto, con la Liga ya finalizada, el equipo azulgrana no tuvo partido hasta el curso siguiente. Y aquel primer partido fue muy ilusionante. Fue el primer partido de un nuevo ciclo, el de Ronald Koeman, que el Barça solucionó con una goleada por 4-0 al Villarreal, en el Camp Nou. Eso sí, se jugó a puerta cerrada, por el mencionado Covid-19.
Primero descalabro de Koeman a Europa, y reacción de equipo superado en el Camp Nou
A pesar de haber empezado el curso con mucha fuerza, el Barça de Koeman sufrió una importante bajada de nivel en el ecuador de la temporada. Los azulgranas acumularon solo dos victorias en un parcial de ocho jornadas de Liga. Con este bagaje llegaron al decisivo match de la fase de grupos de aquel curso. El Barça se jugaba el liderazgo de su grupo, contra la Juventus. En caso de ganar o de empatar con la
El siguiente partido era contra el Levante, en el campeonato de Liga y en el Camp Nou. El Barça encontró muchas dificultades no solo para ganar los tres puntos, sino también para encontrarse a si mismo. Al final lo consiguió, con un solitario gol de Leo Messi. Pero acabó sufriendo mucho. De hecho, aquella victoria abrió una racha esplendorosa en la Liga: 16 victorias y 3 empates en 19 jornadas. Esto permitió que los de Koeman pudieran, al menos, competir por el título, si bien lo acabó ganando el Atlético de Madrid.
Punzada después de una dolorosa goleada del PSG en la ida de unos octavos de la Champions
Si bien el Barça tuvo, en aquel curso, la gran racha mencionada, por el camino uno de los empates mencionados hizo daño. Fue contra el Cádiz, después de siete victorias consecutivas. Era un partido para arreciar la buena salud azulgrana, pero fue un paso atrás. El Barça venía de caer con mucha contundencia en la Champions: 1-4 del PSG en la ida de los octavos de final, con un
Contra el Cádiz, en el match mencionado, el Barça se avanzó al marcador con un gol de Messi, en la primera mitad. Los azulgranas dominaron de pies a cabeza el partido. Aun así, en los últimos instantes, Clément Lenglet provocó un penalti innecesario, y Álex Fernández instaló el definitivo 1-1 al marcador.
Derrota en casa del Atlético de Madrid después del primer retorno a la Europa League
El Barça quedó emparejado el pasado curso en una complicada fase de grupos de la Champions. Bayern de Múnich y Benfica amenazaban con dejar fuera de la fase de eliminatorias a un Barça afectado por el adiós de Messi. Después de una victoria muy obvia de los alemanes en la jornada inaugural, por 0-3 al marcador, el Barça estaba obligado a sacar un buen resultado en el campo del Benfica. Pero volvieron a perder estrepitosamente, con un 3-0 que hizo mucho daño a la figura de Ronald Koeman. Los azulgranas estaban obligados a ganar la doble jornada contra el Dínamo de Kíiv, y a sacar algo de positivo contra los bávaros y los portugueses en Múnich y en el Camp Nou.
Después de la derrota mencionada en el estadio Da Luz, el Barça no supo reaccionar. Tanto fue así, que cayó por 2-0 en el Wanda Metropolitano, contra el Atlético de Madrid. Thomas Lemar y Luis Suárez marcaron los goles, en la primera mitad, para dejar el Barça KO y sin rumbo. El Barça venía de momentos difíciles, y los siguió encontrando: una sola victoria en las cinco siguientes jornadas de Liga, antes de que llegara Xavi Hernández.
De hecho, el terrasense sufrió los siguientes naufragios europeos del Barça. No son, ni de lejos, comparables a los de Roma, Anfield o Lisboa, contra el Bayern. Pero no dejan de ser decepciones. El primero fue la derrota en el campo del Bayern, por 3-0 (nuevamente), en la última jornada de la fase de grupos de la Champions. Fue la derrota que envió al equipo azulgrana a la Europa League. Y, en esta competición, el Barça cayó contra el Eintracht de Frankfurt en aquel día recordado en el Camp Nou.
El Barça perdió contra el Cádiz después de la eliminación contra el Eintracht
Y el equipo azulgrana volvió a reaccionar mal, con una derrota. Un 0-1 que puso de manifiesto la tristeza culé, después de unos buenos resultados y la buena reacción institucional en el mercado invernal. Solo Dembélé estuvo a la altura aquel día, así como los casi 60.000 aficionados que apoyaron al conjunto de Xavi. Eso sí: hubo una huelga de la Grada de Animación, y una protesta previa al match.
El Barça ha caído en el clásico después del empate contra el Inter
Este curso, el Barça ha repetido el patrón del pasado. Ha vuelto a caer eliminado en la fase de grupos de la Champions, si bien se ha dado por motivos como por ejemplo los arbitrales, los de las lesiones o los de la entidad de los rivales. Había el Bayern nuevamente, y también un fuerte Inter de Milán. Todo hacía indicar que catalanes e italianos se disputarían la segunda plaza y, finalmente, los
Lo hicieron de forma virtual después de un empate a tres en el Camp Nou, en un día sin Ronald Araujo, Andreas Christensen ni Jules Koundé. El Inter necesitaba ganar a la cenicienta del grupo, el Viktoria Pilsen, y lo acabó haciendo. Antes, sin embargo, el Barça tuvo una dura reacción: después de este partido, cayó derrotado a Santiago Bernabéu, en la que hasta ahora ha supuesto la única derrota a LaLiga de la xavineta este curso.