Joan Laporta, presidente del Fútbol Club Barcelona, ha hecho su segunda declaración institucional después de la imagen vergonzosa que se vivió en el Camp Nou con la invasión de aficionados alemanes del Eintracht de Frankfurt en la grada del estadio. Sus primeras palabras fueron después del final del partido, en caliente, y estas segundas ya han sido más reposadas, así que se puede empezar a intuir cuál será la línea que adoptará el club a la hora de explicar la crisis social que se ha vivido en estos cuartos de final de la Europa League, la cual ha acabado convirtiéndose en una crisis deportiva.
Laporta defiende que el Barça no es el culpable, pero sí el responsable
Laporta, en primer lugar, defiende que el Barça no es «culpable», pero sí que es «responsable» de los hechos: «El club no es el culpable de lo que pasó. Ahora bien, sí que somos responsables, porque somos los encargados de organizar el partido. La gente que me conoce sabe que asumo las responsabilidades y que tomo medidas, así que las adoptaremos». A la vez, Laporta también ha señalado claramente a los culpables de estos hechos: «Hay dos actuaciones irregulares: las entradas vendidas en la tercera grada a alemanes y parte de los abonos que fueron a parar a los aficionados rivales». Por lo tanto, del mismo modo que ha hecho previamente la vicepresidenta institucional Elena Fort, Laporta señala a las plataformas masivas de venta de entradas, sean turoperadores o páginas web de reventa, y el negocio de particulares a la hora de ceder sus abonos a aficionados del Eintracht. El presidente del Barça cuantifica las entradas vendidas «de forma irregular» en «34.440 que fueron a parar en manos de alemanes».
El presidente del Barça anuncia medidas
Laporta también ha anunciado medidas inminentes que se aplicarán a partir de la temporada que viene para evitar que esto vuelva a suceder. Para capar la reventa, el presidente azulgrana ha comunicado que en las competiciones internacionales las entradas que se vendan en la página web del Barça serán nominativas. Es decir, quién las compre tendrá que hacerlo con su nombre y presentar alguna identificación a la hora de entrar en el estadio para que se pueda comprobar que se trata de la misma persona. Así se evitarán compras masivas de plataformas organizadas: «No queríamos tomar esta medida porque incomoda a los socios que tienen una actitud normal y corriente y que son la gran mayoría, pero ya no nos queda más remedio. No queremos que vuelva a pasar nunca más lo que sucedió al estadio».