El Fútbol Club Barcelona ha ido haciendo los deberes de incorporar nuevos fichajes para mejorar el equipo que dirige el técnico de Tarrasa, Xavi Hernández. Pero, sin embargo, el club azulgrana tiene un problema muy importante que debe solucionar lo antes posible, ya que para inscribir a jugadores como Christensen, Kessié, Raphinha o, incluso, Sergi Roberto, debe liberar una gran cantidad de masa salarial de los contratos de sus futbolistas.
Precisamente, uno de los contratos vigentes que más preocupan en Can Barça es el del centrocampista de los Países Bajos, Frenkie de Jong, quien negoció unas condiciones con la junta de Bartomeu que actualmente son inasumibles por el Barça. Este hecho provoca que haya cierta desesperación dentro de los despachos del Fútbol Club Barcelona, aunque Joan Laporta dijo este viernes durante la rueda de prensa de la presentación del brasileño Raphinha que era falso que el Barça se ve obligado a vender a Frenkie de Jong.
La masa salarial que liberaría De Jong con su venta
La venta del centrocampista del Barça, pese a no ser una operación que gusta a la directiva azulgrana, es una necesidad, pues el futbolista liberaría una cantidad de masa salarial equivalente a unos 42 millones de euros más la suma de su traspaso. A estas alturas, el único club que está interesado en fichar a De Jong es el Manchester United que estaría desesperado por incorporar a un futbolista que ya conoce al actual entrenador del club británico, Erik ten Hag. La oferta del United sería de unos 80 millones de euros, haciendo que Frenkie de Jong se convierta en una nueva palanca para el Barça.
De Jong, la palanca para inscribir a Kessié, Christensen y Sergi Roberto
Con los 42 millones de euros que liberaría a Frenkie de Jong de masa salarial, el Barça podría llegar a inscribir hasta a tres jugadores que actualmente no podrían disputar competiciones oficiales con el Fútbol Club Barcelona. Sería el caso de los fichajes del defensa Christensen y el centrocampista Kessié, junto al reincorporado Sergi Roberto, quien renovó después de terminar contrato. Este hecho ha provocado que el de Reus no entrara dentro de la dinámica de fair play que tiene en estos momentos el Barça, ya que los azulgranas tendrían previsto incorporar al futbolista con las normativas de fair play equivalentes al 1/1 cuando el club acabe el año en positivo a finales de julio una vez se active la venta del 15% restante de los derechos televisivos.