El Fútbol Club Barcelona se enfrentará al Real Madrid en las semifinales de Copa. El otro enfrentamiento será entre el Osasuna y el Athletic Club. Todo ello se ha conocido después del sorteo que se ha celebrado en la sede de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Hay que recordar que, a partir de las semifinales, los cruces de Copa se juegan a doble partido, es decir, con ida y vuelta. En este sentido, el Barça empezará en el Santiago Bernabéu y acabará la eliminatoria en el Camp Nou, cosa que, en principio, favorece los intereses de los culés. Encontrar fechas será complicado, porque el Madrid tiene que disputar el Mundial de Clubes y ambos conjuntos juegan competiciones europeas. Los clásicos se podrían dar entre marzo y abril. En cuanto al otro enfrentamiento, el primero será en el Sadar y el segundo en San Mamés.
El Barça y el Madrid no se encuentran en la Copa desde la temporada 2018-2019, cuando los azulgranas eliminaron a los merengues con un contundente 0-3 en el Santiago Bernabéu en las semifinales, si bien es cierto que acabarían perdiendo la competición en la final contra el Valencia. Esta temporada, los precedentes entre los dos equipos dejan una de cal y otra de arena. El Madrid resultó vencedor del partido de Liga en el Santiago Bernabéu por 3-1, mientras que el Barça obtuvo el mismo resultado en la final de la Supercopa hace pocos días. Los culés fueron muy superiores y ahora mismo no les da miedo un rival como el Madrid.
El camino del Barça para llegar hasta las semifinales de Copa
El Barça es el único equipo catalán que queda vivo en la Copa. Para llegar hasta aquí, los azulgranas han tenido un camino relativamente sencillo. Se ahorraron las dos primeras rondas, porque tuvieron que disputar la Supercopa y esto hace que se acceda a la Copa directamente a la tercera ronda. Además, sus dos rivales fueron conjuntos de categorías muy inferiores: el Intercity Sant Joan d’Alacant y lo Ceuta. En el primer partido, los culés tuvieron que ir hasta la prórroga para ganar. El segundo, en cambio, acabó con goleada. En los cuartos de final, el contrincante del Barça fue mucho más exigente, la Real Sociedad, pero, aun así, la victoria cayó del lado culé.