El Fútbol Club Barcelona se ha marchado del estadio Ciudad de València del Levante con una victoria sobre la bocina. La diana de Luuk de Jong en la recta final del partido ha dado los tres puntos al Barça, en un duelo donde se tiene que reconocer que los azulgranas no han estado nada inspirados. En la primera mitad no se ha podido ver la buena versión de los de Xavi Hernández en ningún momento, mientras que en la reanudación ha habido algunos momentos brillantes de arrebato, que han sido suficientes para dar la vuelta al marcador y convertir en inútiles los tres penaltis que les han señalado en contra.
Muchos señalados en un mal partido del Barça
Ha habido muchos jugadores del Barça que han hecho un mal partido. Por ejemplo, Clément Lenglet, que ha entrado en los últimos minutos, lo único destacado que ha hecho ha sido provocar un penalti de forma absurda. Tampoco se ha visto a Nico González sobre el terreno de juego, quien ha desaprovechado la oportunidad de la titularidad que le ha dado Xavi. En defensa, Ronald Araujo ha estado menos expeditivo que en otras ocasiones, pero quien ha quedado más señalado por la gran cantidad de errores que ha cometido es el lateral derecho brasileño Dani Alves.
Dani Alves, una noche para olvidar
Desde el primer minuto se ha visto que este no sería su partido. Cuando apenas habían pasado unos segundos de juego, Alves ha cometido un grave error que ha estado a punto de significar el primer gol del Levante. El delantero madrileño José Luis Morales ha sido un auténtico dolor de cabeza que le ha puesto las cosas muy complicadas y ha necesitado ayudas constantemente y para acabarlo de rematar, se ha hecho daño y ha querido continuar jugando con molestias, cosa que ha hecho que todavía quedara más señalado. En ataque, ninguna de sus decisiones ha sido acertada y sus centros no han encontrado rematador en ningún momento. Su mal partido, sin embargo, ha quedado del todo sellado cuando ha cometido el primer penalti del Barça, con una acción incomprensible de un jugador de su veterania, puesto que ha sacado el brazo a la altura de la cara del rival sin ninguna necesidad. Una noche para olvidar para el defensa brasileño.
