La selección española de fútbol ha caído eliminada de la Copa del Mundo tras perder en los penaltis contra Marruecos. Este hecho ha provocado que miles de aficionados marroquíes que residen en Cataluña salgan a las calles para celebrar la victoria de su país natal. La fiesta ha durado toda la tarde y gran parte de la noche. Plazas de pueblos y ciudades se han llenado para cantar, celebrar y festejar un hito histórico por el fútbol marroquí. Por otro lado, también ha sorprendido la reacción de algunos de los seguidores, que han salido a las calles con banderas esteladas y bajo el lema de «Viva Cataluña! Viva Marruecos!» y, que también iban acompañados de «Puta España! Puta España!».
Marruecos, en contra de España
Una vez finalizada el partido con la victoria por tres goles a cero de Marruecos en la tanda de penaltis, la fiesta ha dejado la alegría marroquí por toda Cataluña. Incluso, en las zonas donde se han aglomerado más seguidores, se podían distinguir personas que no eran originarias del país africano, pero que festejaban la victoria de la selección de Marruecos. Y es que, tal y como se ha visto en las calles, marroquíes de varias localidades han defendido la libertad catalana exponiendo las banderas esteladas tras la derrota española y, por otro lado, también han mostrado su punto de visto más crítico en contra de España con los gritos de «Puta España!». Es más, los aficionados marroquíes han llegado a montar un castillo de aguja de hasta tres pisos, representando la cultura catalana. Un hecho que no ha pasado desapercibido entre las redes sociales.
La celebración de los marroquíes, mucho más animada que los 120 minutos de partido
En términos deportivos, España hizo un muy mal partido. En 120 minutos de juego solo dispuso de dos ocasiones claras de gol. Es cierto que Luis Enrique no renunció a su estilo de juego de mover la pelota en forma de «U», invirtiendo el esférico de un lado al otro del césped, pero su equipo no estuvo a la altura. Marruecos, en cambio, mostró una solidez defensiva espectacular. No permitió que España conectara con facilidad con sus centrocampistas. Tampoco con sus delanteros. Además, Yassine Bonou, portero de la selección de Marruecos, no permitió que ninguno de los tres penaltis que chutó España entraran en su portería. Pablo Sarabia falló el primero enviando el chut al palo y, posteriormente, Carlos Soler i Sergio Busquets vieron como Bonou paraba sus lanzamientos.