El Joventut de Badalona se ha impuesto al Barça en el derbi de la jornada 26 de la ACB por 83-72. El Olímpico de Badalona ha presentado un ambiente de gala. El feudo verdonegro ha acogido más de 12.000 personas, una cifra que supone el récord de asistencia a un partido de la liga durante esta temporada. Los locales han dominado el marcador en todo momento liderados por Andrés Feliz y Ante Tomic, que han anotado 21 puntos cada uno, y un impecable Simon Birgander, que ha aportado 15 puntos y 11 rebotes.
Precisamente, este último jugador ha hecho ocho puntos en el primer cuarto. El sueco se ha impuesto en el poste bajo a la defensa azulgrana y ha permitido que los badaloneses cogieran las riendas del partido desde el principio. La ventaja local al final del primer tiempo era de tan solo tres puntos, pero la Penya ha acabado de encarrilar el duelo en el segundo cuarto. El Joventut ha protagonizado diez minutos brillantes, donde ha anotado 30 puntos, dieciocho de ellos obra de Feliz y Tomic. Los locales han impuesto un ritmo alto que los azulgranas no han sido capaces de seguir a causa de la buena defensa verdinegra. De este modo, los badaloneses han obtenido una renta de dieciséis puntos al descanso.
El Barça ha conseguido que el partido fuera mucho más lento en la segunda mitad y que la Penya no se sintiera tan cómoda en ataque como a los primeros veinte minutos. Sin embargo, el desacierto desde la línea de tres ha impedido a los culés hacer peligrar la ventaja local. El equipo de Sarunas Jasikevicius tan solo ha anotado seis de los 24 lanzamientos de tres que ha intentado en este partido. El FC Barcelona ha reducido la ventaja hasta los siete puntos en el último periodo, pero Feliz y Tomic han resuelto todos los momentos de incertidumbre para brindar el triunfo al Olímpico. Con este resultado, el Barça mantiene el liderazgo de la ACB y la Penya continúa en cuarta posición con las mismas victorias que el Manresa, que se sitúa tercero.
El Manresa pasa por encima de la Andorra con polémica
El BAXI Manresa ganó con mucha solvencia al Andorra (94-60). El equipo del Bages encarriló el partido antes del descanso por medio de un parcial de 17-2 que permitió que la ventaja local alcanzara los quince puntos. El equipo de Pedro Martínez firmó un tercer periodo espectacular, donde sumó 34 puntos y superó las veinte unidades de ventaja. El Andorra llegó al último cuarto totalmente frustrado ante la imposibilidad de frenar su sangría defensiva. El recital anotador del Manresa continuó en el cuarto periodo haciendo que la renta local superara los treinta puntos.
Después del partido y a través de Twitter, el jugador del Manresa Chima Moneke acusó a Nacho Llovet, del Andorra, de haberle proferido comentarios racistas durante la disputa del duelo. Poco después, el mismo Llovet y su entrenador, David Deudal, negaron estos hechos. Además, el Andorra hizo un comunicado asegurando que Moneke había mentido. La versión real de los hechos tan solo la conocen los jugadores.
