El martes de esta semana, el Joventut venció al Ulm alemán por 82-76 en el Olímpico de Badalona. Una victoria que ha servido para que los verdinegros se consoliden en la segunda posición de su grupo de la Eurocup. Aun así, desgraciadamente la principal noticia se produjo fuera de la pista. En la grada. La realización del partido captó perfectamente como una aficionada emitió insultos racistas hacia el base del equipo rival, el brasileño Yago dos Santos, al grito de «¡mono! Mono!».
Pues bien, según ha informado el club, se han trasladado las imágenes a los Mossos d’Esquadra. Y la policía catalana ya está gestionando el tema. Concretamente, la Unidad Central de Delitos de Odio y Discriminación del cuerpo policial ha abierto una investigación sobre los hechos. Además, el Joventut también ha emitido un comunicado en su página web, para condenar lo que pasó.
El comunicado de la Peña para condenar el acto
En este comunicado, la entidad catalana ha expresado tres elementos. Por un lado, ha reivindicado que «los valores de la Penya, desde su fundación en 1930, han estado presididos por un profundo amor por el deporte en general y por el baloncesto en particular. Un aprecio que no se entiende sin el absoluto respeto por rivales, árbitros y aficionados que nos vienen a visitar al Olímpico de Badalona cada semana».
A continuación, han rechazado «enérgicamente cualquier tipo de comportamiento y/o comentario intimidatorio, vejatorio, racista y/o xenófobo en nuestras instalaciones y en cualquier de los campos donde nuestros equipos disputan sus partidos». Y, finalmente, han informado que ya han puesto los videos «en el conocimiento de las autoridades competentes para que los analicen, pongan en marcha las actuaciones necesarias y tomen las decisiones correspondientes. Como siempre, el Club Joventut Badalona colaborará en lo que haga falta con las autoridades y acatará las decisiones que se deriven».

El club ha acabado el comunicado recordando que «ser la cuna del baloncesto representa un gran honor, pero también comporta una inmensa responsabilidad, para custodiar valores como la integración, respeto, convivencia, igualdad, diversidad, esfuerzo, trabajo en equipo y compañerismo que transmitimos a los más de 500 niños, niñas y adolescentes que nutren nuestro plantel».
Por otro lado, en su perfil de Twitter, el Ulm ha condenado «firmemente el comportamiento mostrado y cualquier comentario racista o discriminatorio dentro o fuera del terreno de juego», y ha agradecido al Joventut su reacción.