El París Saint-Germain está pasando por un momento extremadamente delicado. La eliminación de la semana pasada en manos del Real Madrid a Santiago Bernabéu en los octavos de final de la UEFA Champions League fue una vez muy dura, no tanto por el hecho de caer en la competición que desean ganar con todas sus formas, sino más bien por la imagen que dejó el equipo, dejándose remontar una eliminatoria que tenía perfectamente controlada y sin encajar bien la derrota, con el espectáculo particular de los dirigentes del club francés.
La crisis en el PSG cada día es más grande
La crisis al PSG se ha acentuado en los días posteriores. Su afición todavía ha recibido peor la decepción europea que sus directivos y así lo demostró al último partido de Liga en el Parque de los Príncipes, donde dos de las grandes estrellas del equipo y del fútbol mundial, Leo Messi y Neymar Jr., fueron escridassades por su público. Fue una imagen histórica, puesto que ninguno de los dos jugadores está acostumbrado a recibir este trato tan hostil por parte de su misma afición. De hecho, desde entonces han ido apareciendo informaciones que sitúan el argentino y el brasileño lejos de Francia este mismo verano, a pesar de que los dos tienen contrato vigente y es difícil que la directiva los deje marchar.
Kylian Mbappé, muy afectado por el comportamiento de su afición
Ahora bien, según explica L’Équipe, este comportamiento de los seguidores del PSG también habría afectado negativamente uno de los únicos futbolistas que fue aplaudido: Kylian Mbappé. El medio deportivo francés asegura que el delantero parisiense está muy decepcionado con la hostilidad de los forofos de su equipo con sus mismos compañeros. Mbappé estaría muy afectado al respeto y esto no hace más que dar todavía más argumentos al astro mundial para abandonar el PSG cuando acabe la temporada. Hay que recordar que su contrato finaliza el próximo mes de junio y que el más probable es que marche en el Real Madrid. Los dirigentes del club galo lo están intentando retener de todas las maneras y con ofertas astronómicas, pero los hechos de los últimos días no ayudan de ninguno de las maneras a convencer el jugador.
