Los árbitros siempre han estado en el punto de mira. Es una profesión bastante desagradecida y, desgraciadamente, en España el fanatismo se multiplica. Las últimas actuaciones del colectivo no han ayudado a bajar la crispación. El pasado miércoles, Gil Manzano expulsó con roja directa a Brais Méndez, el centrocampista de la Real Sociedad. Hasta aquí todo normal, porque la expulsión era justa, pero una semana atrás, no se habían sancionado dos entradas similares de Vinícius Jr y Ousmane Dembélé. Las quejas en las redes sociales no tardaron en hacerse notar. Hoy, Carlo Ancelotti ha hablado sobre los errores de los árbitros y los ha comparado con los años 80 y 90: «Si lo comparamos con el arbitraje de los años 80-90, ya no hay corrupción; ha mejorado muchísimo. Tienen un trabajo muy complicado».
Respeto para los árbitros
Carlo Ancelotti siempre ha destacado por ser un entrenador respetuoso y elegante en sus respuestas. Hoy, en la rueda de prensa previa al duelo de mañana contra la Real Sociedad, el italiano ha hablado sobre la polémica arbitral y la tarea de los árbitros: «Tienen un trabajo muy complicado y se equivocan, como todo el mundo». Además, Carletto ha añadido una curiosa comparación con los colegiados de la década de los 80 y 90: «Si lo comparamos con el arbitraje de los años 80-90, ya no hay corrupción; ha mejorado muchísimo». Sorprende que el entrenador del Real Madrid hable abiertamente sobre árbitros que aceptaban sobornos a cambio de favorecer a determinados equipos.
No quiere añadir más leña al fuego con el Atlético
Ancelotti no ha querido dar importancia a las palabras que Gil Marín dijo después del derbi de Copa del pasado jueves: «Fue un partido igualado y merecimos ganar. El resto, son asuntos de los cuales no hablaré. No he leído nada, he escuchado algo. Prefiero no hablar. El mejor que puedo decir es que mi carácter respeta todas las opiniones». El directivo del Atlético de Madrid se quejó de la actuación de César Soto Grado, sobre todo por no expulsar a Dani Ceballos con 0 a 1 en el marcador. Como siempre, el entrenador italiano es un ejemplo de educación y respeto para todo el mundo. Sobre el juego del equipo, Ancelotti ha hecho autocrítica y ha dejado claro que quiere que sus jugadores mejoren mañana domingo contra la Real Sociedad.