Nuevo partido preocupante del Espanyol en un final de temporada nefasto. Los blanquiazules han viajado hasta Gasteiz para enfrentarse al colista de la categoría, el Alavés, con la certeza de que solo necesitaban un punto para asegurar la permanencia de forma matemática, cosa que era el objetivo de mínimos de esta temporada. Aun así, los pericos han vuelto a hacer una mala actuación y han caído derrotados en Mendizorrotza (2-1), dando así esperanzas a los vascos de poder salvar la categoría.
Ahora bien, el Espanyol ha acabado certificando la permanencia pasivamente, puesto que el empate del Mallorca en el campo del Sevilla impide que los baleares puedan recortar la distancia de siete puntos que tienen con los catalanes en las dos jornadas que restan. Además, este resultado también hace que los andaluces ya no puedan atrapar el Barça en el segundo lugar de la clasificación, una lucha que ahora ya solo puede disputar el Atlético de Madrid, si bien es cierto que los azulgranas tienen suficiente con un punto de los seis que quedan para ser segundos.
La crónica del Alavés-Español
En cuanto al partido en cuestión, este no podría haber empezado peor para el Espanyol. En una jugada marcada por la falta de concentración, los catalanes han perdido una pelota cerca de su área y el contraataque del Alavés, muy mal defendido, ha acabado con gol de Miguel de la Fuente. Pocos minutos después, sin embargo, Raúl de Tomás ha forzado un penalti que él mismo ha transformado y ha devuelto la igualdad al marcador. Este empate no reflejaba lo que se veía sobre el terreno de juego, puesto que los vascos han sido muy superiores y podrían haberse marchado al descanso con uno o dos goles de ventaja.
La segunda mitad también ha empezado fatal para los pericos. Yangel Herrera, que había visto una tarjeta amarilla en la primera mitad, ha cometido una falta totalmente innecesaria en medio del campo y ha sido expulsado de forma justa. El Alavés lo ha aprovechado para lanzarse al ataque y enseguida ha llegado el gol de la victoria, obra de Gonzalo Escalante después de rematar una falta centrada al interior del área. El Espanyol puede considerar incluso bueno este resultado, puesto que los locales han tenido varias ocasiones para sentenciar el partido y, si todas las oportunidades claras que han tenido hubieran entrado, estaríamos hablando de una goleada.
Al Espanyol ya solo le quedan dos partidos intrascendentes, contra el València y el Granada, donde lo más interesante será saber cómo recibe la grada del RCDE Stadium al entrenador Vicente Moreno. Después de sus conflictos con Raúl de Tomás y de haber sido silbado con anterioridad, el público perico podría dictar sentencia y pedir la dimisión del técnico valenciano de cara a la temporada próxima.