El tenista balear Rafa Nadal ha caído eliminado del primer Grand Slam de la temporada: el Open de Australia. Su verdugo ha sido un tenista poco conocido, el estadounidense Mackenzie McDonald, número sesenta y cinco del ranking ATP. Nadal, hasta ahora, era el segundo clasificado. Ha sido un partido muy duro para el balear, que no ha podido hacer absolutamente nada contra su rival. Ha perdido los tres sets y, en la recta final del segundo, ha notado una punzada en la pierna izquierda, pero ha querido continuar de todos modos. Al final del duelo ha visto que sufría una lesión en la cadera.
Rafa Nadal, una racha nefasta
En cualquier caso, es un paso más hacia el infierno particular del tenista manacorí. En los últimos diez partidos que ha disputado, solo ha conseguido tres victorias, mientras que ha sumado hasta siete derrotas: una racha nefasta. A pesar de que él insiste en continuar jugando, lo cierto es que los diversos problemas físicos que sufre menguan mucho sus posibilidades de victoria. Es la segunda vez que cae tan temprano en el Open de Australia y la séptima que lo hace en un Grand Slam. Cuando Nadal afronta una competición como esta, siempre es uno de los favoritos, así que la decepción es considerable.
El siguiente Grand Slam no se celebra hasta el mes de mayo. Será el Roland Garros, el torneo fetiche de Rafa Nadal, que ha ganado esta competición en hasta catorce ocasiones, convirtiéndose, de lejos, en el tenista que más veces lo ha ganado. Antes de que empiece este Grand Slam de París habrá todo el circuito de tierra batida, que es la superficie que más controla el tenista balear. Ahora, por lo tanto, tiene un tiempo precioso para recuperarse, hacer limpio de sus lesiones e intentar volver al 100% cuando llegue el momento de la temporada donde más podrá brillar.