El Girona empata en su visita al Celta de Vigo en un partido muy intenso y sigue con opciones europeas. El Celta ha demostrado ante los catalanes una mayor necesidad de conseguir los puntos por no acabar sufriendo para conseguir la permanencia a Primera División. Los locales han estado superiores y a pesar de que Cristhian Stuani ha podido igualar el gol de Carles Pérez en la primera parte, los gerundenses no se han sentido cómodos en la mayor parte del partido. Sin embargo, los de Míchel han luchado hasta el final y pueden dar por bueno este empate que ahora mismo los deja a un punto de la séptima plaza con 49 puntos. El séptimo lugar lo ocupa el Athletic Club con 50 que, ahora mismo, sería el equipo que se clasificaría para la Conference League.
Buen punto al Estadio de Balaídos
El partido ha empezado con intensidad desde el inicio por parte de los dos equipos. A pesar de que no han llegado con excesivo peligro a la portería contraria, el duelo entre gallegos y catalanes ha iniciado con un alto ritmo. Los de Míchel han intentado rehacerse de un mejor inicio de los locales a través de la posesión y coger protagonismo en el partido, pero no han acabado de incomodar la portería de Iván Blanco. Los visitantes han intentado sacar la cabeza con buenas combinaciones, pero en su mejor momento del partido el Celta ha abierto la lata.
El gol local era cuestión de minutos por las sensaciones de juego y así ha sido. El lateral izquierdo del Celta, Javi Galán, ha robado la pelota a Viktor Tsygankov y con una buena jugada individual la ha puesto hacia la incorporación de Carles Pérez y el exjugador del Barça ha hecho el 1 a 0 en el minuto 42 de partido.

El segundo tiempo ha empezado igual que el primero, con un Celta más predispuesto a ir a por el segundo. Aunque los gallegos han podido ponerse por delante, la igualdad ha imperado en el césped de Balaídos. Sin embargo, el Girona ha podido encontrar espacios y en una buena jugada de Tsygankov por la derecha, el árbitro ha señalado penalti de Javi Galán ante las quejas de los jugadores y aficionados locales. Iván Villar ha parado el penalti a Cristhian Stuani y no ha permitido que los rojiblancos hayan podido poner la igualada. Pero el Girona ha visto un rayo de esperanza cuando, Unai Núñez, jugador del Celta, ha entrado en el área antes de tiempo y Mateu Lahoz, ayudado por el VAR, ha hecho repetir la pena máxima. En este caso el portero local, que ha hecho la estatua, no ha podido vestirse de héroe y el uruguayo ha convertido el penalti y ha puesto el empate a 1 con un buen chut raso.
Después de esto, el Celta no se ha deshecho y ha seguido dominando la pelota ante un Girona que ha presionado arriba. Con el paso de los minutos, los de Carlos Carvalhal se han crecido y han ido a por el partido ante un Girona descolocado. El partido ha continuado igualado, a pesar de que con un Celta mucho más incisivo. Gazzanigga ha tenido que intervenir en hasta dos ocasiones ante Carles Pérez y Larsen para evitar el segundo gol y la victoria del Celta. Finalmente, el Girona ha podido aguantar el dominio local y el partido ha finalizado con el conjunto gerundense atacando. Los de Míchel han tenido la última ocasión en pies del joven Joel Roca, pero el partido ha acabado en empate a uno.