El vestuario del París Saint-Germain (PSG) es un polvorín. Se juntan tantas estrellas que hay problemas de manera constante. Una guerra entre Neymar Jr. y Kylian Mbappé fue la gran protagonista del inicio de temporada. Esta situación se ha calmado, pero, ahora, el astro francés ha vuelto a iniciar un conflicto con uno de sus compañeros, en este caso su compatriota Presnel Kimpembe. Se puede considerar, de hecho, que Mbappé lo ha hecho de manera casi involuntaria, puesto que todo ello ha surgido, más bien, de una mala gestión del club.
El PSG le retiró la capitanía a Kimpembe sin consultárselo y se la entregó a Mbappé
En el último partido de la Copa de Francia, donde Mbappé marcó hasta cinco goles contra el Pays de Cassel, un equipo de la séptima categoría del fútbol francés, el delantero parisiense fue el capitán del PSG. Según algunos medios de comunicación, es una estrategia del club para que esté más a gusto y no quiera marchar. Hasta aquí bien. Es decir, no había ninguno de los capitanes habituales, Marquinhos, Marco Verratti o Kimpembe, y Mbappé recibió el brazalete. El problema llega cuando, en la rueda de prensa posterior, el entrenador del PSG, Christophe Galtier, explicó que se le había otorgado la segunda capitanía a Mbappé, cosa que comportaba que se le retiraba a Kimpembe.
El defensa central francés, posteriormente, ha explicado en las redes sociales que él no fue nunca consultado al respeto y que nadie le había dicho nada. Es decir, perdió la segunda capitanía y lo supo a través de la rueda de prensa de su entrenador. En un comunicado que ha firmado él mismo, ha desmentido que estuviera «al corriente» de esta situación, pero, a la vegada, ha asegurado que, «una vez dicha esto», «siempre respetaré las decisiones del club».
