El coche del Lleida Esportiu se ha salvado después de haber flirteado con el precipicio de la desaparición. Con los desastres económicos de los impagos o del desahucio del estadio, todo hacía pensar en los peores presagios. En antiguos fantasmas. Pero un superhéroe ha llegado a tiempo para evitarlo y reflotar el club. Este superhéroe es precisamente un ex futbolista del club, Luis Pereira. La actual junta directiva ha llegado a un acuerdo con Pereira y su grupo empresarial, y éste gestionará el club entrenado por el exfutbolista del Fútbol Club Barcelona Gabri García.
La primera acción que ha efectuado Pereira ha sido ponerse al día con los sueldos de los jugadores y técnicos del club, que esta temporada apenas habían cobrado nada. De hecho, ayer cobraron un mes entero, y hoy lo cobrarían casi todo. En este sentido, el capitán del equipo, reconoce que él y sus compañeros están «muy contentos, porque la situación ya era límite. Había muchos jugadores que ya no podían aguantar más tanto a nivel económico como mental».
Pereira, de hecho, se hará cargo de todas las deudas que hasta ahora los hermanos Esteve, máximos mandatarios del club desde la fundación de éste, habían dejado. Las cifras rondan los cinco millones de euros. Y, además, tras la fuga de muchos futbolistas por la cuestión de los impagos de los hermanos Esteve, Pereira ha prometido realizar fichajes. En declaraciones a TV3, Pereira reconoce que «nuestra idea es que el club represente a la ciudad. Que la gente esté orgullosa del club. Y lo normal es que el club dispute la Segunda División».
Ahora se abre la incógnita del Camp d’Esports. Y es que a raíz de las deudas contraídas con el ayuntamiento leridano y de la inacción hacia los mismos, los miembros de la cámara decidieron por unanimidad desahuciar al club del estadio municipal al que juega sus partidos, hace dos semanas. Sin embargo, ahora, con la incursión de Pereira, se abre la posibilidad de que La Paeria recoja. La decisión pasará por plenario mañana.
