Leo Messi ha sufrido mucho durante su primera temporada en Paris Saint-Germain. El argentino aterrizó allí después de terminar su contrato con un Fútbol Club Barcelona en plena transición. Aterrizó en un proyecto que le ilusionaba. Pero nunca se ha sentido cómodo y la evidencia de esto es lo que ha vivido el último fin de semana. En el partido que han disputado los parisinos en su casa, Messi ha sido silbado. De nuevo. ¡Surrealista!
La afición del PSG vuelve a silbar a Leo Messi
El PSG ha jugado el domingo la antepenúltima jornada de una Ligue 1 que ya ha ganado de forma matemática. Lo ha hecho en su Parque de los Príncipes, contra el Troyes. Era un partido, pues, baladí a efectos resultadistas. Pero podía servir para que el conjunto de Mauricio Pochettino probara cosas y para que brindara una victoria (ha terminado 2-2) y un buen espectáculo a su afición. Lejos de ello, esta afición ha demostrado que no perdona a Messi por haber completado una de sus peores temporadas.
Tanto ha sido así, que le han pitado en muchas ocasiones en las que él ha tenido el balón. Ya ocurrió esto justo después de que los azul-y-rojos cayeran eliminados estrepitosamente contra el Real Madrid en los octavos de final de la UEFA Champions League, cuando los mismos aficionados silbaron al astro argentino y Neymar Jr, otro jugador muy criticado y que ha decepcionado de nuevo. Pero ahora esto se ha convertido en una pequeña tradición.
Pochettino pidió respeto por Messi hace unos días
En una entrevista realizada hace unos días, el técnico de Messi, Pochettino, reivindicó que «juzgar a Messi de este modo es injusto. No tengo ninguna duda sobre su calidad. Messi tiene talento suficiente para hacer lo que debe hacer. Lo hará. La próxima temporada será completamente diferente para él. Ha sido un año de aprendizaje, y no sólo a nivel profesional después de llegar al París Saint-Germain, en una nueva liga y con nuevos compañeros, sino también a nivel familiar. Hay que tenerlo en cuenta. Es un gran cambio que puede afectar a un jugador».
Por tanto, el también argentino pidió un respeto por Messi, lamentando lo que ya había pasado en el partido en cuestión, donde Messi fue silbado por su afición de forma totalmente inesperada: «Está claro que no es algo agradable de vivir. Hemos tenido partidos en el Parque de los Príncipes donde estás triste porque tu afición no anima al equipo. Es algo que te afecta. Siempre hemos hablado del ambiente aquí y esta situación me entristece, me afecta porque fui jugador del PSG y ahora soy entrenador en este club. Espero que se resuelva».
Cuando el barcelonismo pitó un compañero de Messi y el argentino contestó
Esta no es ni mucho menos la primera ocasión en la que una afición futbolística silba a un jugador de su propio equipo. En Barcelona esto ha pasado últimamente. Ha pasado con Philippe Coutinho, un jugador que también ha decepcionado, con un rendimiento muy por debajo de lo esperado. Aficionados azulgranas silbaron al brasileño en un partido, y justamente Messi se dirigió a ellos para pedirles que hagan lo contrario: aplaudirle. Es verdad que las aficiones tienen todo el derecho a silbar a sus jugadores. Pero también deben reflexionar y pensar si esto beneficia a los intereses de su equipo, y por tanto los suyos, o más bien les perjudica.
