El serial de Kylian Mbappé terminó. Pero el post partido sigue. Mientras que en España los aficionados madridistas y la prensa intentan digerir la renovación del futbolista con el Paris Saint-Germain y por tanto el fichaje frustrado por el Real Madrid, en Francia lo celebran. Por muchos motivos, la continuidad del campeón del mundo en el país vecino es una gran noticia para ellos. Uno de los que lo celebró fue precisamente una leyenda del fútbol francés: Thierry Henry. Eso sí, también ha dado su versión, dejando vislumbrar que la decisión trasciende muchas barreras y que se ha producido fruto de presiones de figuras importantes.
En declaraciones al medio Goal, el jugador del Fútbol Club Barcelona entre 2007 y 2010 ha celebrado que la continuidad de Mbappé en el PSG «es enorme para el fútbol francés. Pensé que se iría. Creo que todo el mundo lo pensó. Incluso él mismo. Pero creo que cambió de opinión». Y aquí se ha mojado, en la línea de la cuestión de las presiones.
Si según Henry incluso Mbappé pensaba que se iría, ¿qué acabó pasando? «No lo sé exactamente. Debe haber habido algo profundo en algunas discusiones. Vi que algunas personas le estaban llamando. Aparentemente, cuando el presidente de Francia [Emmanuel Macron] le llamó, lo hizo porque se quedara, fue una locura».
Y es que, efectivamente, Macron le llamó. También lo hizo Nicolas Sarkozy, presidente de Francia entre 2007 y 2012 y político con mucha influencia en las altas esferas de la república. Y no hace falta añadir que por parte del emir de Qatar y su entorno también hubo un esfuerzo desmedido para que Mbappé acabara accediendo a firmar el contrato. El contrato astronómico en términos económicos y logísticos podría ser la punta del iceberg de más y más presiones.
Volviendo al pensamiento de Henry, el también campeón del mundo (en 1998) ha rechazado que su compatriota decidiera continuar en la entidad parisina sólo por una cuestión de dinero: «Obviamente tiene el club en su corazón. La gente hablará de lo que conseguirá en términos de dinero, pero el dinero lo habría tenido también en el Madrid. Se podía ir, pero se quiso quedar».
