El Chelsea continúa luchando para encontrar la estabilidad. A pesar de la inversión de 330 millones de euros por parte de su propietario, Todd Boehly, la situación no mejora en Stamford Bridge, con el equipo en noveno lugar en la Premier League a 20 puntos del Arsenal. Las críticas hacia el club van en aumento, y ahora el jugador catalán Marc Cucurella se ha convertido en su objetivo. Aunque el entrenador, Graham Potter, defiende públicamente al lateral, un referente del Chelsea, el exjugador Frank Leboeuf, ha sido muy duro en su evaluación del rendimiento de Cucurella desde que llegó este verano.
Leboeuf ha dicho: «No queremos ver a Marc Cucurella en el Chelsea. Simplemente no es suficiente bono. Es una locura que lo hayan fichado por 60 o 70 millones de libras esterlinas. No tiene nivel para el Chelsea». Estas críticas son un reflejo de la frustración del club y de su afición. Después de una inversión multimillonaria, esperaban ver un mejor rendimiento del equipo y una mejor posición en la clasificación. La falta de progreso es una preocupación real para todos los que están involucrados en el club.
El Chelsea ha invertido más que nunca en el mercado de fichajes, pero continúa en caída libre
El Chelsea ha intentado hacer muchos cambios para intentar revertir su suerte, pero hasta ahora no ha tenido éxito. Ha contratado nuevos jugadores y ha cambiado de entrenador, pero todavía no han encontrado la fórmula para triunfar. A pesar de esto, el club sigue trabajando para conseguirlo. Ha contratado un grupo de jugadores jóvenes y talentosos, y espera que esta nueva hornada de talento pueda aportar el cambio que necesita el club. También está intentando establecer una filosofía y una identidad claras, para ayudar a guiar el equipo hacia el futuro.
En definitiva, el Chelsea continúa en una investigación constante para conseguir la estabilidad y el éxito. Aunque la situación actual es frustrante, la inversión y el esfuerzo del club para encontrar soluciones dan esperanzas de ver un futuro mejor para este histórico club de fútbol. Hay que recordar que antes de la guerra de Ucrania, su propietario, el ruso Roman Abramovich, había conducido el equipo a ganar una UEFA Champions League de la mano de Thomas Tuchel. La invasión, sin embargo, forzó un cambio en la presidencia del club y Boehly no está sabiendo encontrar la manera de enderezar el rumbo del Chelsea.