La eliminación de la selección española del Mundial de Qatar era cuestión de tiempo. España no llegaba como favorita para levantar el título, pero sí que se esperaba que diera más de sí misma. Y es que, por segunda vez consecutiva, España ha quedado eliminada contra una selección inferior, en los octavos de final y en la tanda de penaltis. Solo hay que recordar que a la Copa del Mundo de Rusia del 2018 fue la anfitriona quien eliminó a
España ha jugado su peor partido
De acuerdo, Marruecos es la selección revelación del Mundial. Llegaba a los octavos de final contra España tras quedar primera de grupo, donde ha superado a Bélgica y Croacia. Ahora bien, no deja de ser un equipo que, en un principio, es inferior en España en individualidades. Tal como hace siempre, España ha sido quién ha tenido la batuta del juego, mareando los contrarios con sus pases, pero no ha sabido atacar el área de los jugadores marroquíes. Y es que, en más de 120 minutos de partido y más de 1.000 pases, los de Luis Enrique solo han disfrutado de dos oportunidades de gol. Un dato que demuestra el mal planteamiento del duelo con futbolistas que, por instantes, parecían atemorizados.
Luis Enrique, el grande señalado
Luis Enrique no ha tenido un Mundial fácil. Y es que, desde antes de que empezara la Copa del Mundo, estaba sufriendo una campaña en contra de sus decisiones. Es más, una vez la selección española ha caído eliminada, no ha tardado en autoproclamarse como el responsable de la derrota. Ha confesado que ha sido él mismo quien ha seleccionado a los jugadores que iban a chutar desde los once metros y todo hace intuir que, muy probablemente, no continúe al cargo de seleccionador de aquí en adelante, puesto que acaba contrato con la federación y, aparentemente, no renovará.
