Hasta aquí han llegado los escépticos. Aquellos quienes reprochaban a Leo Messi que no hubiera conseguido «nada» con su selección, ya pueden ir pasando a la cueva. El astro de Rosario ha guiado a Argentina al tercer Mundial de su historia. Además, lo ha logrado ejerciendo de capitán y líder absoluto, con siete goles y tres asistencias durante el torneo. Por si no fuera suficiente, ha marcado los dos penaltis que ha chutado en las dos tandas que ha disputado la
El debate se termina demasiado tarde
Messi ha decidido, a 18 de diciembre de 2022, cerrar el eterno debate del fútbol del siglo XXI. El hecho de levantar el Mundial de Qatar desacredita a todos aquellos quienes no lo consideran el mejor de la historia. Para gustos, colores, pero es innegable la superior grandeza del ’10’ argentino. Después de todas las críticas, presiones e incluso insultos que ha recibido desde todas partes, Messi ha devuelto la Copa del Mundo a casa. La alegría en Argentina es inmensa, porque el país se había volcado para cumplir este sueño. Con siete goles y tres asistencias en siete partidos, el de Rosario ha demostrado que tenga la edad que tenga es determinante e insustituible para cualquier equipo en el cual juegue. Si bien los sudamericanos no lo querrán poner por encima de Diego Armando Maradona, se lo merece al 100%.

Cristiano Ronaldo queda hundido después de este Mundial
Las comparaciones siempre son odiosas, pero este Mundial ha demostrado muchas cosas. Mientras uno acaba de levantar la Copa del Mundo y ha llevado la gloria a su país, otros fueron eliminados por Marruecos en cuartos de final y se marcharon peleados con su seleccionador. Este torneo ha enterrado un debate que ciertos sectores todavía mantenían vivo, a pesar de que hace años que tendría que estar muerto. Messi continúa siendo el mejor futbolista del mundo. Cristiano Ronaldo no está ni entre los diez mejores. Ha sido un gran futbolista y, durante algún momento, le ha podido discutir el trono del fútbol, pero la calidad de uno y el otro es incomparable. Hay que reflexionar sobre las barbaridades que se han dicho sobre Messi y no solo en Europa, también en su país. La palabra «pechofrío» solo será un extraño recuerdo de un pasado turbio.