Los árbitros de la Primera División se plantean ir a la huelga y, de este modo, parar la Liga, según informa la Cadena COPE. El desencadenante de esto es una ola de hostilidad que han detectado los colegiados del Estado y, sobre todo, una brutal agresión que sufrió un árbitro en Ceuta este fin de semana por parte del padre de un futbolista. Los árbitros creen que se ha generado un clima donde se han convertido en el puchimbol y quieren tomar alguna medida para pararlo. Habrá una reunión definitiva durante este mismo martes donde se tomará la decisión final.
Los árbitros, en el foco de la polémica durante toda esta temporada
Esta temporada ha habido mucha polémica sobre el uso del VAR. Se puede considerar que ningún club profesional está satisfecho con la aplicación del sistema de videoarbitraje. Los colegiados, en este sentido, lamentan que continuamente se esté poniendo en entredicho su trabajo. Han sido muchos los equipos que han emitido comunicados donde aseguran sentirse perjudicados por el arbitraje. Esto provoca un linchamiento público, sobre todo en las redes sociales, y es este el clima de hostilidad al cual hacen referencia. El extremo es la agresión que ha sufrido este fin de semana el árbitro ceutí.
La huelga, una medida extrema
Los árbitros dependen de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), donde hay el Comité Técnico Arbitral (CTA). Si bien es cierto que estos organismos han pedido en varias ocasiones que se respete la tarea de los colegiados, el colectivo arbitral podría ir mucho más allá y tomar la decisión de parar la Liga. En esta huelga que se plantea, de momento, no hay ninguna demanda clara. Solo pedir respeto y cambiar la situación en la cual se encuentran inmersos, que definen con las palabras «ola de hostilidad».
