El mercado de fichajes de invierno del Fútbol Club Barcelona ha sido el más prolífico de la historia de la entidad azulgrana. Nunca habían llegado hasta cuatro refuerzos en esta ventana del mes de enero. De hecho, el Barça es el equipo de la Liga y el tercero de Europa que más dinero se ha gastado, con los 55 millones de euros pagados en el Manchester City por la incorporación de Ferran Torres. Las otras llegadas han sido las de Dani Alves, que vino antes pero no ha podido ser inscrito hasta ahora, Pierre-Emerick Aubameyang, que ha fichado gratuitamente, y Adama Traoré, cedido hasta el final de temporada con una opción de compra no obligatoria.
El técnico del primer equipo azulgrana, Xavi Hernández, pidió refuerzos y el club ha respondido de la mejor manera que ha podido, teniendo en cuenta la delicadísima situación económica del Barça. Esto, pues, es una buena noticia para el entrenador catalán. Aun así, estos cuatro fichajes esconden una consecuencia amarga. Por normativa de la UEFA, Xavi tendrá que descartar un de ellos para jugar la Europa League. De este modo, la entidad azulgrana solo podrá inscribir a tres en la segunda competición continental.
El egarense todavía no ha tomado ninguna decisión definitiva, puesto que el Barça no ha hecho ninguna de las inscripciones, pero se pueden intuir las intenciones del técnico. Ferran Torres no será el descartado de ninguna de las maneras. Está llamado a ser uno de los referentes del equipo azulgrana a corto, mediano y largo plazo, así que esta opción no está sobre la mesa. Adama Traoré, por el hecho de que a Xavi le encanta jugar con extremos abiertos y porque es joven y puede aguantar la exigencia de compaginar dos competiciones, también tiene pocos números de quedarse fuera. Entonces, todo quedará entre Dani Alves y Aubameyang. Los dos son jugadores veteranos, pero el lateral brasileño tiene menos recambio en su posición y es más polivalente, así que lo más probable es que el delantero gabonés sea el descartado y solo juegue la Liga.
