Gran victoria del Barça en Mestalla. El juego de posición que el técnico Xavi Hernández intenta inculcar a sus futbolistas desde que llegó al banquillo azulgrana empieza a hacer su efecto. Los jugadores culés han interpretado de forma maravillosa la lectura de espacios y los pases a hacer para sacar el máximo rendimiento de sus ocasiones y han goleado al València de forma incuestionable. Tres goles en la primera mitad y uno más a la segunda han condenado a los locales (1-4), que han visto cómo Pierre-Emerick Aubameyang anotaba su primer doblete como azulgrana el mismo día en que se ha estrenado como goleador.
Cuando haces pop, ya no hay stop
Xavi ha vuelto a hacer rotaciones, pensando en la vuelta de los decimosextos de final de la Europa League contra el Nápoles del próximo jueves. Adama Traoré, que había sido titular desde su llegada, ha descansado. En su lugar ha jugado Ousmane Dembélé, que de este modo volvía a un once inicial desde su negativa a renovar. Además, Ronald Araujo ha demostrado nuevamente que es un prodigio físico y ha disputado los noventa minutos a pesar de haber vuelto justo a tiempo de unas molestias en la pierna izquierda.
La puesta en escena de los azulgranas ha sido algo más tímida que en últimas ocasiones y, si bien han controlado la posesión, no han generado peligro hasta la mitad del primer tiempo. Un gran pase de Jordi Alba en profundidad para Pierre-Emerick Aubameyang ha sido la primera ocasión del Barça y, afortunadamente para los culés, ha acabado en gol. El delantero gabonés se ha estrenado como goleador con una diana marca de la casa. Ha controlado bien el pase de Alba, ha encarado portería y, en un mano a mano sin ángulo, ha definido con mucha clase por el palo corto del portero.
Aubameyang ha abierto la lata en cuanto al marcador y también en cuanto al juego. A partir de su gol, ha empezado una exhibición azulgrana que los culés seguro que han disfrutado. Eso sí, antes el VAR ha anulado el empate al València en una acción absurda en que Ter Stegen se ha metido adentro de la portería una centrada lateral. Por suerte, era fuera de juego, porque el portero alemán ha cometido un nuevo error imperdonable. Después de esto, nuevo pase increíble de Alba, bien cazado por Dembélé, y el extremo francés ha regalado el gol a Frenkie de Jong. Poco después, el tercero del Barça. Una jugada casi calcada, donde Gavi ha asistido a Aubameyang para que marcara a placer un doblete que ilusionará a los culés. Antes del descanso, el VAR ha vuelto a anular correctamente un gol al València en una acción en que la pelota se ha marchado claramente fuera de banda antes de que los locales anotaran.
Pedri mata el partido
El Barça ha combinado de forma acertada la efectividad y el dominio de la posesión en la primera mitad. La segunda, además, ha empezado del mismo modo, porque Gavi ha estado a punto de marcar en un contraataque muy bien lanzado y los azulgranas también han estado a punto de conseguir el cuarto con un penalti sobre Aubameyang que ha sido invalidado por fuera de juego. Aun así, en la acción posterior, el València ha recortado distancias con un gol de cabeza de Carlos Soler, muy mal defendido por Óscar Mingueza, que ha entrado por Eric Garcia que se ha ido con molestias.
Los locales han empezado a creer en sus posibilidades y se han lanzado al ataque. Cuando Xavi lo ha visto, ha reaccionado rápidamente y ha hecho entrar a Pedri por De Jong. De este modo, el Barça ha ganado en equilibrio y, además, también en gol, porque el centrocampista canario ha hecho una auténtica barbaridad cuando apenas acababa de entrar. Ha cazado una pelota a la frontal del área y, sin controlarla, ha chutado con muchísima potencia, de lejos, y ha batido Giorgi Mamardashvili con un lanzamiento espectacular.
A partir de aquí, el Barça ya se ha quedado más tranquilo. Ha tenido algunas buenas ocasiones e incluso Aubameyang ha estado cerca de anotar un hat-trick. Aun así, el València tampoco se ha rendido y ha intentado reducir distancias en algunas ocasiones. Aquí sí que se tiene que destacar, por fin, el gran papel de Ter Stegen. El portero alemán ha estado sublime bajo palos en la segunda mitad y ha impedido goles ya cantados en Mestalla con paradas de mérito. En el tramo final del partido, el Barça ha regalado una nueva alegría a Xavi, porque se ha defendido con la pelota en los pies y el València no ha tenido más oportunidades claras.
