El delantero polaco Robert Lewandowski estaría más cerca que nunca de concretar su fichaje por el Fútbol Club Barcelona el próximo verano. Según informa el diario alemán Bild, el Bayern de Múnich se reúne hoy con el representante del jugador, Pini Zahavi, y recibirá una petición formal para abandonar el club, a la vez que también se le presentará, directamente, la oferta del Barça. Lewandowski consideraría que su etapa en Baviera ha acabado y que, teniendo en cuenta los éxitos que ha dado al equipo, se ha ganado el derecho de que le dejen marcharse.
El Bayern busca sustituto a Lewandowski
Además, el diario Bild también asegura que el Bayern de Múnich ya está trabajando en la llegada del sustituto de Lewandowski. Ya hay un nombre sobre la mesa, que es el del delantero francés Sébastien Haller. Actualmente juega en el Ajax de Ámsterdam, pero ya ha pasado por la Bundesliga, puesto que vistió la camiseta de la Eintracht de Frankfurt. Tiene veintisiete años y se encuentra en uno de los mejores momentos de su carrera. En este curso ha marcado hasta treinta y tres goles y ha repartido nueve asistencias. Solo ha disputado ocho partidos en la UEFA Champions League, pero, aun así, todavía es uno de los máximos goleadores de la competición.
Las opciones del Barça de fichar a Lewandowski
En cuanto a la llegada de Lewandowski al Barça, el gran problema será encajarlo en los límites de la masa salarial de la entidad azulgrana. Actualmente cobra unos veintitrés millones de euros brutos y, a pesar de que seguro que se rebajaría el sueldo teniendo en cuenta que ya ficharía con treinta y cuatro años, no dejaría de ser uno de los jugadores mejor pagados del club culé. Si no hay salidas significativas y si no se cierra el acuerdo con CVC, será del todo imposible que Lewandowski pueda ser inscrito.
Si todo acaba saliendo bien y el delantero polaco se convierte en azulgrana, el Barça habrá incorporado un futbolista de garantías. A pesar de que ya se encuentra en una fase muy avanzada de su carrera, también está viviendo un momento muy dulce. Es el máximo goleador del fútbol europeo con muchísima diferencia respecto al segundo y, si el Bayern de Múnich no hubiera caído de forma sorprendente en los cuartos de final de la Champions a manos del Villarreal, también sería un firme candidato al Balón de Oro.
