El Trofeo Joan Gamper que el Fútbol Club Barcelonaganó el pasado domingo ante el Pumas mexicano supuso muchas cosas. En primer lugar, ganar el título por décima vez consecutiva. Después, que en el primero con Xavi Hernández como técnico el equipo se exhibiera. Se exhibiera en un posible nuevo ciclo, con la presentación de los nuevos fichajes, que lo hicieron muy bien. De hecho, dos de ellos presentaron candidatura para formar unas sociedades que prometen mucho: Raphinha demostró su creciente entendimiento con Ousmane Dembélé, mientras que Robert Lewandowski hizo válida la frase de «los buenos siempre se entienden» con un Pedri González excelso.
Esta segunda sociedad brilló desde que el árbitro pitó el inicio del partido. Lewandowski y Pedri olvieron la sangre desde el principio y mordieron. Aún entraban aficionados y aficionadas en el estadio cuando el centrocampista sirvió un buen balón al delantero, que lo mejoró encontrando un agujero impensable en la portería. El 1-0 era sólo un indicio de lo que vendría después. Porque en la siguiente jugada, el polaco puso una asistencia deliciosa al canario. Pasada de nuevo en un agujero que sólo él vio, para que Pedri driblara al portero y pusiera tierra de por medio en el marcador.
No satisfechos con esto, siguieron buscándose. Después de que Dembélé anotara su gol, llegó la obra maestra de la noche. En una jugada transicional, Eric Garcia cedió a Lewandowski. Y él hizo magia. Demostró que tiene ojos en la nuca. Y es que de primeras, pasó el balón con el espolón a Pedri, que emuló su anterior gol. Acababa de nacer, definitivamente, una sociedad.
Las declaraciones de Pedri que lo dejan claro
Y eso quedó patente en el pospartido. En el micrófono de TV3, Pedri reconoció que “la verdad es muy fácil entenderse con un futbolista que juega así. Los buenos futbolistas siempre se entienden, e intento buscarlo siempre”. Además, celebró que «es un lujo jugar con él, es un jugador que es un espectáculo, disfruto viéndolo como remata y cómo se asocia. Espero que nos dé muchas alegrías, tanto a mí como a la afición» .