La situación del joven centrocampista del Fútbol Club Barcelona Pablo Torre en el club azulgrana es bien espinada. El cántabro fichó después de unos grandes inicios en el Racing de Santander. Fue, de hecho, uno de los artífices del ascenso del equipo blanquiazul en la Segunda División del fútbol. Pero desde verano ha tenido muy pocas oportunidades. Y, según ha informado el diario Sport, este mismo miércoles el jugador puede haber tenido una reunión con el técnico, Xavi Hernández, para resolver su futuro.
Torre, concretamente, en materia oficial, sólo disputó los últimos diez minutos de partido contra el Viktoria Pilsen, en la victoria azulgrana por 5-1 al debut de la UEFA Champions League de este curso. Fue, de hecho, el debut del jugador con el primer equipo. Sin embargo, desde entonces no ha tenido opciones. En total, pues, ha jugado poco más del 1% de los minutos posibles, en detrimento de, especialmente, un Pedri González y un Gavi excelsos. También están por delante Frenkie de Jong y Franck Kessie.
Si bien la temporada es larga y el calendario, como consecuencia del Mundial, está muy comprimido, el jugador necesita tener continuidad. Naturalmente no debe jugarlo todo, pero para seguir creciendo (aún tiene 19 años) sí reclama al menos una presencia en el equipo de Xavi a la semana. Por eso, ahora se le presenta una oportunidad.
Xavi anticipó la reunión con Pablo Torre tras el partido contra el Elche
Después de vencer al Elche, Xavi ya adelantó que en el parón de selecciones «nos hemos propuesto hablar con calma, porque al final debe participar y jugar». Y este miércoles habría llegado el momento. Según el diario Sport, el técnico desea tener siempre a Torre a sus órdenes, y está convencido de que entrenarse cada día con el resto de la plantilla es muy beneficioso para él.
Sin embargo, teniendo en cuenta la necesidad que tiene de jugar, la solución pasa por empezar a participar con el Barça B, entrenado por el mítico Rafa Márquez. Eso sí: el hecho de que dispute la categoría de bronce de fútbol español, que es la que abandonó el propio Racing cuando ascendió a la de plata, puede hacer dudar al jugador, que tiene la última palabra.