El nuevo Fútbol Club Barcelona que ha realizado Xavi Hernández ha empezado la temporada 2022/23 con un resultado que pocos esperaban. Y es que después de los refuerzos y el fútbol que se ha visto en el Spotify Camp Nou en esta primera jornada liguera, pocos aficionados pueden creer que el Barça no haya sido capaz de ganar su primer partido como local. Sin embargo, la realidad es que entre la falta de acierto al finalizar de cara a portería y la desesperación de no marcar cuando el tiempo se iba agotando, ha demostrado que un equipo que se ha rehecho en tan poco tiempo también necesita tiempo para formar grandes raíces que unan a todos los miembros del Barça.
Los nuevos fichajes han jugado un buen papel en su debut
Exceptuando que Jules Koundé no ha jugado con el Barça después de que el club no inscribas al defensa francés a tiempo, el resto de fichajes han realizado un buen papel en su debut como jugadores azulgranas en su primer partido oficial. Y es que Lewandowski, Raphinha, Christensen y Kessié han trabajado duro durante cada minuto que han disputado sobre el terreno de juego. Aunque, al final, el resultado no fue el esperado por parte de nadie.
El barcelonismo deberá tener paciencia
Nadie puede esperar a que de una semilla salga un gran árbol en menos de un mes. Primero las raíces deben adaptarse al suelo, al medio y al clima donde se encuentran para poder crecer. Nadie duda de la calidad que tiene este equipo, pero el tiempo y la adaptación serán los responsables de que el Barça vuelva a la élite del fútbol mundial. Hay que esperar alguna jornada más para que los jugadores del Barça se unifiquen más y se entiendan con mayor facilidad para encontrar menos dificultades para superar la portería del rival.