La secretaría técnica del Barça ya trabaja en la confección de la plantilla para la temporada 2023-2024. Con el Mundial de Qatar en juego, los azulgranas tienen tiempo para reflexionar y planificar proyectos a largo plazo. Una de las cuestiones que más preocupa a los culés es la gestión de las ‘vacas sagradas’. Gerard Piqué ha sido el primero en dar un paso al lado, anunciando su retirada del fútbol profesional. Sergio Busquets y Jordi Alba tienen que ser los siguientes en decidir su futuro. Todo hace indicar que el de Badia del Vallès no renovará su contrato y abandonará Barcelona el próximo verano, probablemente rumbo a la Major League Soccer. El caso de Alba es diferente. El lateral del Hospitalet ha manifestado en más de una ocasión su deseo para continuar vistiendo de azulgrana unos años más, pero desde el club no lo ven claro. Según Mundo Deportivo, el Barça quiere negociar con él una rescisión, porque tiene un acuerdo con la entidad culé hasta el 2024.
Piqué ya está fuera y Busquets, a punto
Gerard Piqué anunció un miércoles que se retiraría del fútbol un sábado. Parece imposible de creer, pero el central catalán llevó la decisión en secreto hasta el momento de hacerla pública. El anuncio cogió por sorpresa a todo el mundo y la afición se volcó con mensajes de agradecimiento y aprecio al ya exfutbolista azulgrana. Contra el Almería, Piqué vistió por última vez la camiseta del Barça ante un Camp Nou que se llenó a tope. Por otro lado, parece que Sergio Busquets tomará la misma decisión que Piqué, pero a final de temporada. El medio centro del Vallès no tiene intención de alargar su vínculo con el Barça y quiere iniciar una aventura en los Estados Unidos. Habrá que ver cuál es su decisión final, pero todo hace indicar que la leyenda azulgrana se despedirá del Camp Nou.
El club quiere negociar la salida de Alba
Con Piqué ya retirado y Busquets a punto de abandonar el Barça, todas las miradas apuntan a Jordi Alba. Siempre en el centro de las críticas, el lateral catalán continúa decidido a quedarse en el Barça y demostrar que todavía puede rendir al máximo nivel. Xavi Hernández ya no lo considera un futbolista imprescindible y al club le gustaría deshacerse de su elevado sueldo. Con la irrupción de Alejandro Balde y el fichaje de Marcos Alonso, el lateral izquierdo está lo suficientemente bien cubierto cómo para poder prescindir de Alba. Ahora bien, el ex del Valencia tiene contrato hasta el 2024 y no solo lo quiere cumplir, sino que le gustaría ampliarlo. Los azulgranas intentarán negociar con él una rescisión el próximo verano.
