El caso Negreira va avanzando y se van conociendo nuevas informaciones y, a medida que esto pasa, más bien surgen más interrogantes que no se desvanecen. La tesis inicial y, de hecho, las sospechas de la Fiscalía de que José María Enríquez Negreira utilizaba el dinero del Fútbol Club Barcelona para que los árbitros favorecieran al equipo azulgrana van perdiendo fuerza o cada vez son menos claras, sobre todo a medida que aparecen nuevas pruebas. Ahora, el diario El Mundo, que ha tenido acceso al sumario del caso, ha revelado una nota de un exdirectivo del Barça, Josep Contreras, que desvía el foco de atención de los presuntos pagos a árbitros y lo sitúa sobre un aspecto diferente.

En este sentido, la nota en cuestión apareció en el interior de una caja fuerte de la casa de Contreras, que murió el pasado mas de diciembre, y que venía precedida de una «cláusula» que decía el siguiente: «Solo es posible abrir esta nota en caso de que se produzca la desgracia más grande del mundo para nosotros. Posdata: lo entregaríamos de buena gana para evitarlo».
Las tostadoras, los bolígrafos, los jamones y las sombrillas del caso Negreira
En otro ámbito, y también según informaciones distribuidas por el diario El Mundo, se ha conocido que Enríquez Negreira utilizaba el dinero de la empresa DASNIL 95, la cual firmaba los contratos con el Barça, para comprar varios objetos que podrían haber acabado en manos de árbitras en forma de regalo. La lista de estos objetos, pero, es bastante surrealista. Empieza con «jamones, vinos, licores y quesos», pero acaba con cosas como «tostadoras, mantas, pantalones, bolígrafos con puntero láser, sombrillas y bolsas isotérmicas».





