Poca gente duda del barcelonismo de Dani Alves. El brasileño está sumando su novena temporada en el Fútbol Club Barcelona y siempre ha sacado a colación su cariño por el club. Ahora, ha vuelto para solucionar los problemas que se encontró en el lateral derecho Xavi Hernández. Y lo ha hecho por la puerta grande: en seis partidos ha registrado tres asistencias y el gol y la celebración icónicos en el trascendental partido contra el Atlético de Madrid. Pero hace seis veranos se marchó por la puerta trasera. No lo hizo por la que merecía su trayectoria en el Barça. Y ahora, a través de una publicación de Instagram, el de Juazeiro ha querido resarcir esto.
Alves ha comenzado el texto con la grandeza que siempre le ha caracterizado: «¿Puedo contaros una historia, que por alguna razón están pensando en desistir de algo?». El lateral prosigue: «Pues miren, yo vine aquí en el 2008, escribí bonitos capítulos en este club hasta el 2016 y, por alguna razón, no pude continuar aquí. Me fui sin despedirme, pero con una sensación que un día volvería».
El jugador más ganador de la historia afirma que «fui a jugar a diferentes lugares, a vivir diferentes sensaciones, pero siempre con el sentimiento de que volvería a jugar aquí. Ya dejé claro muchas veces que cuando vestía esa camiseta [del Barça] me sentía poderoso y, como la vida persigue a quienes persisten, aquí estoy otra vez».
Y, finalmente, por si con las anteriores palabras no ha tocado suficiente la fibra, ha acabado recordando que «son días como el del vídeo [lo que ha compartido, de su celebración en el Camp Nou contra el Atlético de Madrid] que hacen que todas las gotas de sudor derramadas en el camino hayan merecido la pena. Aquí estoy muy orgulloso de mí mismo, y una vez más sigo insistiendo: todo tiene un precio, pero tú debes tener valor. ¡Que sea eterno mientras dure!». Esta última frase es la misma que pronunció en la celebración en el estadio del doblete de 2016, y que acabó convirtiéndose en una despedida.
De este modo, el futbolista ha sanado una herida que llevaba poco más de un lustro sin suturar. Alves ha vuelto a Can Barça, y con él las sonrisas. Esto era una de las cosas que necesitaba un equipo que en los últimos años ha acumulado más lágrimas que alegrías. El que ha disputado contra el Atlético de Madrid ha sido su primer partido en el Camp Nou este año, y ya se vio una afición feliz. ¿Casualidad? Probablemente, no.
