Leo Messi ha puesto punto final a sus merecidas vacaciones. El argentino levantó la Copa del Mundo hace unas semanas, y después de celebrar en la capital argentina de Buenos Aires esta consecución, ha pasado unos días rodeado de amigos y familia en Rosario. Ahora, pues, ya ha vuelto a su ciudad de residencia, París, y ha vuelto a los entrenamientos de su club, el Paris Saint-Germain.
Era un retorno que generaba mucha expectación. Los últimos días se había visto como otros campeones del mundo, como Alexis Mac Allister, habían tenido recibimientos sensacionales a sus equipos. Pero claro, Messi es Messi. Y ha sido recibido con todos los honores. Esto toma mucha relevancia teniendo en cuenta que en la final venció precisamente a la selección francesa, con Kylian Mbappé como único representante de los parisienses. Un Mbappé que, de hecho, no ha estado presente en este entrenamiento y por tanto no ha estado en este homenaje.
En su primer entrenamiento después del Mundial, Messi ha entrado al césped a través de un pasillo que todos sus compañeros y el cuerpo técnico del equipo le han hecho. Al final, le han regalado una condecoración. Durante todo el rato en el cual el argentino ha atravesado el pasillo, rodeado de aplausos, no podía parar de sonreír. Una señal que puede demostrar su comodidad en el campeón francés. Después de una primera temporada de adaptación, en esta ha obtenido mejores registros, mejor juego y más felicidad.
El sentido abrazo de Messi y Neymar
Ya no están amigos suyos como Ángel di María y Leandro Paredes, también campeones del mundo. Pero todavía está un íntimo suyo, Neymar Jr. De hecho, los dos se han dado un abrazo que ha sido inmortalizado y que demuestra las ganas que tenían de volverse a ver.
Ahora falta ver como recibirá al siete veces Balón de Oro su actual afición. La próxima semana, los de Christophe Galtier recibirán el Angers en el Parque de los Príncipes, y podría ser el momento en el cual se le hiciera un homenaje nuevo y todavía más contundente. Y esto podría hacer que Messi se sintiera todavía más como en casa, y que tuviera un argumento extra de cara a una posible renovación con los franceses.
