La desastrosa situación bélica que ha causado la Federación de Rusia desde ayer en su vecina nación Ucrania está generando muchas consecuencias. Las más graves son las víctimas mortales que ha provocado el ejército ruso en la región. A estas alturas, hay más de 130. Pero este conflicto está incidiendo en otros muchos aspectos. Mucho menos importantes, sí. Sin embargo, también tienen una dosis de relevancia. En el conjunto de sanciones que diversas instituciones de carácter continental y mundial, destaca una deportiva.
La UEFA ha decidido sancionar al país ruso . Y es que estaba previsto que la final de la UEFA Champions League de este año se disputara en territorio ruso. Concretamente, en el estadio Gazprom Arena, del Zenit de San Petersburgo y, por tanto, en la ciudad occidental rusa de San Petersburgo. Pero después de los horribles sucesos geopolíticos, y de una reunión para evaluar los efectos de los ataques en cuestión, la asociación europea ha cambiado su sede.
Y la lleva a un escenario muy conocido. Lo ha trasladado al Estadio de Saint-Denis de París. Esto significa que, a pesar de no ser el estadio del París Saint-Germain, el equipo entrenado por Mauricio Pochettino, si llegara a la última instancia de la competición, lo haría como anfitrión. Es, pues, una gran motivación por Neymar Jr, Leo Messi, Kylian Mbappé y compañía.
La final se jugará el sábado 28 de mayo. Ahora, sin embargo, la competición todavía transcurre en la ronda de los octavos de final. El equipo anfitrión de la final, en términos geográficos, tiene la misión de sobrevivir la vuelta al Santiago Bernabeu contra el Real Madrid, al que derrotó por 1-0 en la ida al otro gran estadio parisino, el Parque de los Príncipes , gracias a un golazo de Mbappé.
Pochettino, extramotivado
Pochettino, conocedor de este cambio, recordó en rueda de prensa que el hecho de que la final de la Champions vaya a disputarse en la capital francesa «es una motivación extra «. Si no tenían suficiente con los alicientes de la vuelta de Messi en el Santiago Bernabeu después de las numerosas exhibiciones que ha hecho como futbolista del Fútbol Club Barcelona, < strong>el reencuentro de Mbappé con la afición blanca por primera vez desde el serial veraniego de su fichaje finalmente frustrado o la posible reaparición de Sergio Ramos al ‘estadio blanco, ahora han encontrado uno nuevo.
El último equipo que ha disputado una final de Champions en su propia ciudad fue el Bayern de Múnich de la temporada 2011/2012. Se enfrentó al Chelsea de Didier Drogbay Frank Lampard, y éste se impuso a los penaltis y se llevó el trofeo hacia Londres. Y, la última vez que se jugó una final del máximo torneo continental en París fue cuando el Barça de Ronaldinho se impuso en el Arsenal de Thierry Henry por 2-1, la temporada 2005/2006.
