El centrocampista Ilaix Moriba no deja de protagonizar noticias negativas desde hace un año. El guineano se marchó del Barça el pasado verano después de que el club azulgrana le buscara una salida ante la negativa del jugador a renovar cuando tan solo le quedaba un año de contrato. El futbolista pedía un salario completamente desorbitado por un jugador de dieciocho años y la directiva barcelonista se negó rotundamente a aceptar sus pretensiones económicas.
En Alemania ya no lo quieren
Después de romper su relación con el Barça, Ilaix Moriba se marchó al Leipzig y el club alemán tan solo ha necesitado seis meses para acabar harto del jugador. El guineano está cedido en el València desde el pasado mercado de invierno y tendría que volver al conjunto teutón el próximo verano. Sin embargo, el diario alemán Bild asegura que la directiva del Leipzig no quiere que este futbolista vuelva a su equipo nunca más. Según este medio, la directiva de este club considera que Ilaix Moriba es un jugador inmaduro y que tiene conductas de persona egocéntrica. El mismo diario ha compartido alguna anécdota que el exblaugrana habría protagonizado en Alemania, como por ejemplo pedir a los fisioterapeutas del equipo que le sirvieran uva para comer mientras le hacían un masaje.
La situación de Ilaix Moriba puede suponer un auténtico dolor de cabeza para el Leipzig. El entrenador del equipo, Domenico Tedesco, ha sentenciado el centrocampista y no lo quiere volver a ver a su plantilla según el Bild. Ahora, la directiva del club alemán tiene que ver qué hace con un futbolista que le costó dieciséis millones hace menos de un año, pero que no puede jugar con su equipo. Una posible solución que tiene el Leipzig es negociar con el Valencia la prolongación de su cesión en este club. Varios medios aseguran que la directiva valencianista y su técnico, José Bordalás, están contentos con el rendimiento que ha ofrecido el jugador hasta el momento. Por lo tanto, verían con buenos ojos que siguiera en el club valenciano. Seguramente, la situación del guineano no se resolverá hasta el verano, pero el centrocampista tendría que empezar a mostrar un cambio de actitud porque ya van dos clubes que han tenido problemas con el jugador. Este hecho no es nada bueno por su imagen y puede impedirle dar un salto futbolístico.