El Atlético de Madrid es conocido, entre otros motivos, por tener su grupo de aficionados ultras muy acurrucado. A diferencia del Fútbol Club Barcelona o el Real Madrid, la entidad colchonera deja entrar en su estadio a estos integrantes violentos, que responden al nombre de Frente Atlético y que tienen una ideología de extrema derecha. Además, aunque de vez en cuando protagonicen hechos condenables, ningún miembro de la junta directiva toma medidas.
El pasado domingo, en el duelo que el equipo madrileño ha disputado y perdido contra el Villarreal (por 0-2), estos ultras han protagonizado dos imágenes impropias del siglo XXI. Más bien parecen extraídas de la época en la que el fútbol estaba casi dirigido por los hooligans. La primera en cuestión se produjo en la última jugada del encuentro.
Gerard Moreno celebra un gol y los ultras le tiran objetos
Con un 0-1 en el marcador y poco tiempo por delante, Antoine Griezmann, Ángel Correa y compañía buscaban con desesperación el gol que les otorgara el empate, y por tanto pretendían evitar la primera derrota del curso. Con todo el equipo rojiblanco volcado en el área del portero Gerónimo Rulli, los amarillos mataron el partido con un contragolpe. Lo hicieron mediante Gerard Moreno. El delantero catalán marcó el 0-2 definitivo. Y para celebrarlo, hizo lo que hace habitualmente: hacer una mueca en la cámara más cercana. Un gesto dedicado a sus hijas, como dejó claro en el pospartido.
Sin embargo, hay mucha gente que se calentó. En primera instancia, el guardameta del conjunto de Diego Pablo Simeone, Jan Oblak, corrió hacia el ex jugador del Espanyol para recriminarle la acción. Parece que interpretó que estaba provocando su afición, ya que la cámara estaba situada frente a ella. Rápidamente, el delantero se lo contó, pero eso no evitó que el árbitro le enseñara una incomprensible tarjeta amarilla. Y todo esto, mientras llovían objetos desde la gradería del Metropolitano más cercana.
Los ultras insultan a Mario Hermoso, jugador del Atlético de Madrid
Después, terminada la contienda, los ultras, enfadados por la derrota, se centraron en un jugador de su equipo: Mario Hermoso. Según la COPE, el también ex jugador del Espanyol recibió insultos. Le llamaron, al menos, «madridista hijo de puta», haciendo alusión, de una manera lamentable, su pasado en la cantera del Real madrid, y «maricón«.
También le lanzaron objetos, e insultaron a su compañero Griezmann. Todo ello provocó que el defensa se encarara con los autores de ello. La situación no fue más grave porque algunos compañeros suyos le separaron y evitaron que entrara en la grada.
Algunos de los precedentes más violentos del Frente Atlético
Es, pues, un nuevo capítulo protagonizado por los ultras del Frente Atlético. Recientemente, en el partido de Champions que enfrentó a los españoles y al Manchester City de Pep Guardiola en tierras británicas, un miembro del grupo hizo un saludo nazi. La UEFA decidió sancionar al club dirigido por Enrique Cerezo con el cierre de una gradería para el partido de vuelta, si bien al final la sanción no prosperó porque el TAS lo va evitar.un saludo nazi que hizo un miembro del Frente Atlético, grupo ultra del conjunto colchonero, en el partido de ida en Inglaterra.
En el pasado, el Frente Atlético ha llevado a cabo dos acciones criminales: asesinó al seguidor de la Real Sociedad Aitor Zabaleta y el ultra del Deportivo de A Coruña Jimmy. Sin embargo, siguen teniendo acceso al estadio del Atlético de Madrid e, incluso, teniendo una buena relación con la junta. Una junta que, o por incompetencia o por miedo, no ha hecho la limpieza de ultras y de violencia en su estadio que el resto de grandes equipos europeos sí han hecho.
