Este fin de semana está previsto el inicio de la Liga F, es decir, la Liga femenina de fútbol profesional. Ahora bien, los hechos de las últimas horas ponen seriamente en peligro la disputa de la primera jornada. Las árbitras y asistentes de esta competición han emitido un comunicado mediante la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en el cual advierten que no dirigirán ningún partido hasta que no se defina su situación laboral y económica. Aseguran que «el estamento arbitral es el único que queda al margen» de ser regulado legalmente después de la profesionalización de la Primera División femenina de fútbol hace poco tiempo. También afirman que a estas alturas no tienen las «condiciones mínimas por el ejercicio de nuestra actividad» y piden unas condiciones laborales «asimilables a las de los árbitros de la competición masculina».
La respuesta de la Liga F al comunicado de las árbitras de la RFEF
El inicio de la Liga F está especialmente en peligro porque la respuesta del órgano que regula esta competición no ha sido especialmente conciliadora. En un comunicado, la entidad presidida por Beatriz Álvarez acusa al máximo dirigente de la RFEF, Luis Rubiales, de estar mintiendo a las árbitras y asistentes. El tono utilizado en el texto de la Liga F es durísimo contra el presidente de la Federación: «Luis Rubiales vuelve a utilizar a la mujer como ariete para conseguir su único objetivo, destruir el fútbol femenino español e impedir que el fútbol profesional femenino crezca». Según la Liga F, Rubiales está «engañando» a las árbitras en cuanto que ya existe una negociación avanzada con la RFEF para regular la situación de las colegiadas y garantizar que tengan las condiciones laborales adecuadas. En este comunicado también se asegura que la competición no se parará y recuerda a las árbitras que su obligación es asistir a los partidos.