El Fútbol Club Barcelona ha cuajado un gran partido contra el Valladolid, el mejor de la nueva etapa del equipo con Robert Lewandowski en la plantilla, y todos los jugadores que han estado sobre el terreno de juego merecen ser reconocidos y aplaudidos. Desde el portero, Marc-André Ter Stegen, que no ha tenido mucho trabajo, pero ha resuelto todas las ocasiones en las cuales ha sido exigido, hasta la delantera, con un partidazo del tridente de ataque, pasando por una defensa sólida y creativa y un medio del campo solvente, que ha cumplido con el objetivo de hacer llegar balones a los de arriba.

Jordi Alba, señalado por Xavi Hernández
Así pues, no hay ningún jugador que salga señalado entre todos los que han estado sobre el césped. Sí que hay uno, sin embargo, que queda especialmente tocado por el hecho de haberse quedado en el banquillo. Se trata del lateral izquierdo catalán Jordi Alba, que no ha disputado ni un minuto. Es la primera vez que marcha en casa inédito sin tener problemas físicos desde hace muchas temporadas. El jovencísimo Alejandro Balde, de tan solo dieciocho años, le ha quitado el puesto, como ya pasó en el último partido de Liga contra la Real Sociedad. Y no solo esto, sino que Balde ha estado sensacional: se ha incorporado cuando tocaba al ataque con mucha velocidad y desequilibrio y ha estado correcto en las acciones defensivas en las que se le ha requerido. El mensaje del entrenador, Xavi Hernández, a Alba no puede ser más claro.
Las vacas sagradas del Barça pasan a un segundo plano
Ha pasado lo mismo con Gerard Piqué, que de momento ha estado inédito en todos los partidos de Liga que se han disputado. Él no sale tan señalado, porque tiene una fuerte competencia en el eje de la defensa con jugadores como Jules Koundé, Ronald Araujo, Eric Garcia o Andreas Christensen, pero no hay ningún tipo de duda de que Xavi ha dado definitivamente el paso de dejar las vacas sagradas en un segundo término. De hecho, el único capitán que ha sido protagonista ha sido Sergio Busquets, con un buen rendimiento en el pivote defensivo. Sergi Roberto ha jugado, pero no ha entrado hasta la segunda mitad. Eso sí, durante los minutos que ha estado sobre el terreno de juego ha tenido tiempo de marcar un gol.




