El FC Barcelona ya trabaja en la confección de la plantilla para la temporada 2023-2024. No se ha llegado ni a la mitad de la actual campaña, pero la secretaría técnica del club azulgrana ya piensa más allá. Y es que la economía de la entidad es delicada, por eso hay que ir asegurando nuevos ingresos. Algunos de estos ingresos dependen de hacer caja con ventas de jugadores, con la liberación de su correspondiente sueldo. Si se quieren incorporar nuevos futbolistas, hace falta que antes abandonen el Barça otros. Sergiño Dest es uno de los que tiene más números de hacer las maletas. El norteamericano, actualmente cedido en el AC Milan, no entra en los planes de Xavi Hernández y los azulgranas quieren venderlo cuando vuelva de Italia. El lateral derecho no está contando con demasiada confianza en San Siro, por lo cual no será sencillo encontrarle una salida en verano.
Dest, de ilusión a decepción
Sergiño Dest llegó a Barcelona como una gran apuesta de futuro. En el Ajax de Ámsterdam había demostrado sus grandes cualidades técnicas y físicas y el Barça pagó 21 millones de euros a los neerlandeses para hacerse con sus servicios, en 2020. El rendimiento, no obstante, ha estado muy lejos del esperado. Bajo las órdenes de Ronald Koeman vimos una versión aceptable de Dest, pero con la llegada de Xavi Hernández sus actuaciones decrecieron notablemente. Tácticamente, ha demostrado ser un jugador flojo, incapaz de entender los nuevos conceptos que quería implementar el entrenador egarense del Barça.
Tampoco es titular en Milán
Si el próximo verano se quiere acudir al mercado para fichar a nuevos jugadores, hay que liberar masa salarial. La cantidad que se puede ingresar por Dest, en caso de venderlo, será sustancialmente inferior a lo que se pagó por él, pero el Barça necesita deshacerse de su sueldo. En Milán, el americano no cuenta con la confianza de Stefano Pioli. El técnico italiano no le da minutos: Dest ha disputado ocho partidos esta temporada, entre UEFA Champions League y Serie A y, de estos ocho, tan solo dos como titular. Es un bagaje muy pobre para un futbolista que se fichó con la intención que se convirtiera en el nuevo propietario de la banda derecha del Camp Nou.
